Isabel y el duque de Edimburgo toman sus tradicionales vacaciones en Balmoral

Este martes, la reina Isabel II y su esposo, el duque de Edimburgo llegaron a Escocia para pasar sus tradicionales vacaciones de verano.
Duque de Edimburgo y la reina Isabel II iniciaron sus tradicionales vacaciones de verano en Escocia.

Luego de casi cinco meses en confinamiento por la crisis sanitaria del coronavirus, en el castillo de Windsor, la reina Isabel II y su esposo, el duque de Edimburgo llegaron este martes a Escocia para pasar sus tradicionales vacaciones de verano en la residencia de Balmoral.

A bordo de un avión privado arribaron en Aberdeenshire, la soberana de 94 años y su esposo, quienes luego fueron trasladados junto a sus dos dorgis –una mezcla de un perro salchicha con un corgie- en coche hasta el castillo.

Tras su llegada en medio de la pandemia, las festividades habituales para recibirlos quedaron totalmente canceladas y es que, la tradición marcaba que la reina hiciera un recorrido junto a la guardia de honor, antes de entrar al castillo, que durante más de 150 años ha sido el refugio privado de la familia real británica. En este destino, regularmente los royals hacen picnics o fiestas de tiro.

Aunque se supone que Isabel II estará de vacaciones , la realidad es que seguirá trabajando, leyendo documentos diplomáticos, como las famosas cartas rojas que se le entregan diario, además, continuará con las audiencias e incluso, cumplirá con uno que otro compromiso público, vía remota.

Antes de cambiar de residencia, la monarca se reunió con su única hija, la princesa Ana con quien tuvo un almuerzo, aparentemente como adelanto de su cumpleaños 70, que celebrará el próximo 15 de agosto. Hasta el momento, el palacio de Buckingham no ha confirmado el motivo por el que coincidieron mamá e hija, pero todo apunta a que efectivamente, fue un adelanto de cumpleaños.

De acuerdo con el diario británico Daily Mail, Isabel II organizó una reunión socialmente distante, a la que no asistieron otros miembros de la familia, en Frogmore House, una residencia real ubicada en el Parque del castillo de Windsor.

La última vez que la reina Isabel se dejó ver en un acto público fue en la boda de su nieta, la princesa Beatriz y el empresario inmobiliario Edoardo Mapelli Mozzi, misma que se celebró en Windsor en una ceremonia privada a la que solo asistieron 30 personas muy cercanas a la pareja.