De una forma inesperada, la duquesa de Cambridge, Kate Middleton, hizo una visita a las reclusas de la prisión femenil del sureste de Londres, en donde tuvo oportunidad de platicar con ellas y conocer algunos casos que llevaron a las mujeres a terminar ahí, siendo en su mayoría por problemas de adicción.
La royal mom agradeció de todo corazón a las presidiarias que conoció, especialmente porque fue una reunión off the record. Pero a pesar de esto, tuvo oportunidad no solo de platicar con estas mujeres que están en rehabilitación, sino también de conocer las instalaciones de la cárcel.
“Me recordaron hoy cómo las adicciones son el corazón de tantos problemas sociales, y cómo estas substancias pueden jugar un rol bastante destructivo en las vidas de personas vulnerables. Volví a ver que una falta de intervención temprana en la vida para enfrentar los problemas de salud mental y otras cosas puede tener profundas consecuencias para las personas durante toda su vida”, expresó la duquesa mediante una declaración.
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Por otro lado, la esposa del príncipe William nuevamente dio cátedra de estilo al ataviarse en un vestido tweed plata de 550 dólares de The Fold, mismo que combinó con una clutch gris y pointy heels del mismo color. Luciendo especialmente joven con su nuevo corte de pelo, demostró una vez más que la elegancia no tiene nada que ver con el costo de una prenda.