¿Cómo surgió la idea de emprender su propio negocio?
Eugenia siempre ha sido muy sincera con sus seguidores, a quienes les contó que cuando empezó con la idea de vender dulces enchilados, nunca imaginó el alcance que llegaría a tener.
Inició vendiendo dulces en su escuela para poder ahorrar dinero y, poco a poco, fue cobrando fuerza, hasta que tomó la decisión de fundar su propia marca. Su motivación más grande fue su novio, Emilio Antun, quien se había ido a estudiar a Ciudad de México.

Al comentarlo con sus papás, ellos fueron bastante claros; si quería viajar a la CDMX a visitar a su novio, tenía que pagar su propio boleto de avión. Así fue como Euge no paró de trabajar hasta lograrlo. A este proyecto también se unió su mejor amiga y ahora socia, Valeria Quintana, de quien es inseparable.
Pero las cosas no terminaron ahí, su espíritu emprendedor la motivó a seguir creando, pero esta vez en el mundo de la belleza porque, según sus redes sociales, si de algo Eugenia es apasionada es con todo lo que tenga que ver con beauty tips, skincare y el cuidado del pelo, como lo ha demostrado con KeerLab, su siguiente gran acierto.