Nueva York es sorprendida por el ritmo dominicano

Pocas cosas detienen al ajetreado ritmo al que los neoyorquinos están acostumbrados, pero República Dominicana acaba de lograr justamente eso. Porque si hay algo capaz de detener ese estilo de vida frenético, aunque sea por un instante, es la calidez y la alegría que definen a la isla caribeña.

República Dominicana tomó la estación de Grand Central con una intervención que llevó sabor, música y energía latina al corazón de Manhattan. Las actividades del 3 de diciembre iniciaron con un recorrido en el que se presentó la iniciativa que, durante las siguientes semanas, buscará llevar la esencia dominicana a millones de personas.

El momento más emocionante llegó cuando el merengue de Toño Rosario irrumpió el metro y sorprendió a curiosos que no esperaban encontrarse con una probada del país durante su trayecto de vuelta a casa. Música, color y ese sabor tan característico del país llenaron el espacio y atrajeron a decenas de personas que se sumaron a la experiencia.

Además de la música, el ambiente visual fue parte crucial: varios vagones y pasillos del metro fueron intervenidos con imágenes de playas turquesas, arquitectura colonial, selvas vibrantes y paisajes icónicos de la isla.

Para el ministro de Turismo, David Collado, la intervención representó un hito histórico para la imagen del país: “Por primera vez, la esencia de la República Dominicana se toma los rieles de Nueva York. Hoy nuestro país se muestra ante millones de pasajeros, posicionando nuestra marca en el corazón de una de las ciudades más influyentes del planeta”, dijo a través de sus redes sociales.

La elección de Grand Central fue clave, un punto donde confluyen culturas, trayectos y energías distintas, donde la vibra dominicana llegó para hacerse notar. Con estas acciones, República Dominicana dejó claro que su propuesta turística va más allá de playas paradisíacas: también es música, tradición, historia y una forma de vivir que te hace querer conocer más.