Agradece a todo lo que hace por ti
Haz este ejercicio todos los días y ya verás como cambia la perspectiva que tienes de tu cuerpo. En lugar de criticar tus piernas porque no te parecen tonificadas, dales las gracias por todos esos lugares maravillosos a los que te han llevado. En vez de odiar a tus brazos porque te parecen “grandes”, agradéceles por la oportunidad que te dan de abrazar a tus seres queridos día con día. La próxima vez que quieras hablar mal de cualquier parte de tu cuerpo, dale la vuelta, piénsalo dos veces y mejor agradece cada parte de ti.

Sigue a perfiles que te sumen en lugar de restarte
Con las redes sociales, los usuarios pueden editar sus vidas mostrando solo los mejores y más envidiables momentos, mientras se ocultan los esfuerzos, las dificultades y principalmente las imperfecciones e inseguridades, cosa que causa muchísima angustia y desesperación en todos nosotros. Es por esto, que te invitamos a seguir perfiles de personas que te inspiren, que te aporten y principalmente te ayuden a crecer y a aceptarte tal y como eres.