“El activismo incansable de Michael J. Fox por investigar el párkinson junto con su optimismo infinito ejemplifica el impacto de una persona para cambiar el futuro de millones”, dijo David Rubin, el presidente de la Academia a través de un comunicado.

La vida de Michael J. Fox estuvo marcada tras su diagnóstico de párkinson en 1991 y en el diagnóstico del médico de que solo podría trabajar 10 años más. Esta situación lo hizo sucumbir en la depresión y el alcoholismo, pero gracias al apoyo de su esposa, la actriz Tracy Pollan, y de un terapeuta, finalmente lo pudo superar.
Años más tarde, una resonancia magnética confirmó que tenía un tumor en la médula espinal que amenazaba con dejarlo paralítico. Por lo que en 2018 tuvo que ser operado y, tras duras sesiones de rehabilitación, el actor salió adelante y retomó sus actividades en doblajes para el cine.

Finalmente, en 2020 se despidió definitivamente del cine, una industria que ahora reconocerá su valor y aportación a la cinematografía, donde siempre será recordado como el inquieto Marty de Volver al futuro.
Además, la compositora Diane Warren recibirá un Oscar honorario en los Premios de los Gobernadores junto con los directores Peter Weir y Euzhan Palcy.