Lo normal hubiese sido que la lectura del guion de una comedia de instituto de los años 80, Fast Times at Ridgemont High, pasara relativamente desapercibida por mucho que contara con celebridades de la talla de Julia Roberts o Morgan Freeman. Sin embargo, la confirmación de que también juntaría a Brad Pitt y Jennifer Aniston lo convirtió en uno de los momentos más esperados de los últimos meses, porque supondría el reencuentro de la antigua pareja después de su comentadísima interacción en la gala de los SAG Awards del pasado enero.
El humorista Dane Cook fue el responsable de organizar el evento benéfico que recaudó fondos para la organización sin ánimo de lucro CORE y la iniciativa REFORM Alliance. La actriz era una de las primeras celebridades que tenía en mente y ella aceptó encantada su propuesta sin saber que acabaría dando lugar a su segunda reunión del año con su exmarido.
"No estoy tratando de ser cursi, pero cuando le envié un mensaje, no podría haber sido más encantadora. Estaba muy emocionada y dispuesta a todo", reveló ahora Dane en una entrevista al podcast Better Together with Maria Menounos.
El nombre de Brad surgió después de que se hubieran realizado los fichajes iniciales y él no lo pensó dos veces antes de decir que sí cuando su equipo le pasó la invitación.
"No vaciló ni un momento; no puso ninguna norma, no hubo ningún 'no' ni nada por el estilo", añadió.
Ante las cámaras que habían instalado en sus respectivas casas, los ex se mostraron muy cordiales: cuando le presentaron, el intérprete dedicó un saludo en especial a Jennifer, a quien se dirigió como 'Aniston', y ella se lo devolvió exclamando "hola, cariño".
Entre bambalinas, los dos se mostraron igual de encantados de volver a verse las caras, aunque fuera a través de una pantalla. Tampoco se escandalizaron cuando descubrieron los personajes que les habían tocado y que implicaban que recrearían una de las escenas subidas de tono más míticas de la película.
"Lo que vieron ustedes fue justo lo que habíamos esperado que sucediera, es decir, una interacción muy buena entre dos personas increíbles con un talento brutal", afirmó Dane.