Inés Gómez Mont habla de su recuperación luego de dos cirugías en el cerebro

La conductora contó que su segunda operación fue más agresiva, pues tuvieron que rapar para abrirle la cabeza, cicatriz que ahora presume con orgullo.
Inés Gomez Mont

Hace unos días, Inés Gómez Mont le reveló a la conductora Fernanda Familiar en una entrevista que le concedió para su canal de YouTube, cómo enfrentó uno de los momentos más complicados de su vida al someterse a una delicada cirugía en la que se le extirpó un tumor benigno que tenía en el cerebro.

Por primera vez, la conductora abrió su corazón al hablar de esta complicada etapa de su vida y platicó que el proceso que enfrentó antes de la operación inició cinco años antes, tiempo en el que sentimientos como la negación y el miedo la invadieron, sin embargo, siempre se mantuvo positiva apoyada en su familia y su fe.

Pero ahora, en una segunda entrega de la entrevista, Inés reveló que tuvo que someterse a una segunda operación que no estaba planeada, además de cómo fue todo el proceso de rehabilitación.

“La primera recuperación no me fue tan mal. En la primera cirugía el doctor me dijo que lo más seguro es que el segundo no tuviera que operar nunca en la vida porque estaba en una zona donde probablemente nunca me diera lata. De repente pasó un año más y de repente un día estoy en mi casa y suena mi celular, era el doctor y me dice: ‘Inés te tengo malas noticias, el tumor ha crecido brutalmente’, el que nunca pensamos que iba a dar lata, de repente se nos dejó ir terriblemente. ‘necesito que te vengas inmediatamente a la clínica, te tengo que volver a operar’”.

En ese entonces, Inés estaba trabajando en el programa Familias frente al Fuego, pero prefirió guardar silencio y no decir nada antes de abandonar el proyecto. Pero apenas acabó de grabar su participación cuando fue invitada a conocer al Papa Francisco en el Vaticano: “Yo soy una mujer muy devota y si el Papa me da la bendición, yo voy a entrar a la cirugía muy tranquila”, señaló. Sin embargo, finalmente su viaje se canceló, por lo que tuvo que viajar a Estados Unidos para la operación.

La presentadora contó que a diferencia de la primera cirugía, la segunda fue mucho más invasiva, pues tuvieron que raparla para abrirle la cabeza, cicatriz que ahora presume con orgullo, pues la considera una de sus batallas mejor ganadas.

“Esta me dolió mucho más, y la recuperación sí fui a terapia intensiva, pero entré muy tranquila a la cirugía. Y como la primera no me dolió tanto, pensé que no iba a ser como ésta. Esta segunda fue terrorífica porque entré a la cirugía, me mandaron a terapia intensiva sin poder ver a mis chiquitos y me daba pánico no estar para ellos y que algo sucediera”.

Una vez que Inés despertó de la anestesia, a los doctores les importaba que hablara, pues la operación se practicó muy cerca del nervio del habla, y cuando le preguntaron cómo se sentía, la conductora solamente levantó los brazos en señal de victoria.

Ines aprovechó para agradecerle a Fernanda todo el apoyo que le brindó durante esos meses tan complicados y recordó que la periodista quería llevarle tequila y mariachis a su casa para animarla.