Aunque lo que más llamó la atención de su grabación fue cuando reveló un extraño ritual que realizó para no tener problemas con el clima.
“Por ser el mes de junio era época de lluvias. Eso era lo que más nos preocupaba a todos en la producción porque un par de días antes, que ya habíamos empezado con el montaje del escenario, llovió muchísimo; fue una tormenta torrencial y tuvieron que resguardar y hacer casi un desmontaje porque aquello estaba muy complicado”, contó la cantante.
“Ese día, cuando me desperté en la mañana, a mediodía, lo primero que hice fue salir al jardín a clavar cuchillos; dicen que clavando cuchillos en la tierra no llueve. Yo dije ‘Desde aquí voy a aprovechar, desde la casa voy a ir haciendo mi petición a Diosito para que no llueva’. Desde ahí empezamos a clavar cuchillos en el jardín de la casa, por si las moscas, funcionara o no. Manuel (Mijares) me ayudó”, señaló.