Por norma general tanto sus hermanas como ella delegan las responsabilidades domésticas de su día a día en sus asistentes personales, pero Khloé Kardashian acudió en los últimos días a varios supermercados de las cadenas Trader Joe's y Ralphs situados en la zona de Los Ángeles donde reside.
Para sorpresa de todos los que se encontraban haciendo cola en las cajas registradoras, la celebridad se ofreció a pagar de su bolsillo la compra de varias personas de avanzada edad, que forman parte de los grupos de población más vulnerables ante la actual crisis del coronavirus.
Muchos establecimientos han reservado unas horas específicas en su horario de apertura para que sus clientes que presentan un mayor riesgo de contraer la enfermedad puedan hacer sus compras con más seguridad y regresar cuanto antes a sus casas para continuar con el aislamiento.
De acuerdo con el portal TMZ, Khloé también adquirió más de 200 tarjetas regalo de esas tiendas que ha visitado para repartirlas entre los empleados y ayudarles así tanto a ellos como a sus familias en unos momentos muy difíciles, en los que mucha gente ha perdido su empleo debido a las medidas establecidas para prevenir la expansión de la pandemia que han obligado a muchos negocios a cerrar sus puertas temporalmente.