El castillo de Balmoral, considerada la residencia favorita de la reina Isabel II, abrirá sus puertas por primera vez al público este verano.
La monarca británica, que falleció en esta propiedad en septiembre de 2022 a los 96 años, pasó muchos veranos allí acompañada de su esposo el duque de Edimburgo.
Siempre se ha dicho que era el lugar donde más libre se sentía mientras organizaba picnis y montaba a caballo por los terrenos de la propiedad.
Los visitantes podrán recorrer partes del castillo, que aún siguen utilizando los miembros de la monarquía, en una serie de visitas guiadas que tendrán lugar entre el 1 de julio y el 4 de agosto en grupos reducidos de hasta 10 personas.
Las entradas cuestan entre 100 y 150 libras, e incluyen el té de la tarde.
La experiencia promete llevar a los curiosos en un viaje histórico a través de varias de las habitaciones del castillo de Balmoral para descubrir sus orígenes y comprender por qué ha enamorado a varias generaciones de la familia real.
La propiedad fue adquirida por la reina Victoria y el príncipe Alberto en 1845, y a día de hoy sigue siendo utilizada por el actual monarca, Carlos, y su esposa Camilla.
En el salón de baile se pueden contemplar las acuarelas pintadas por el propio Carlos de sus paisajes favoritos en las residencia de Balmoral, Highgrove y Sandringham. También se exponen trajes de Carlos y Camilla, de la difunta reina Isabel II y de la Reina Madre.
Por su parte, a reformada Ala Este de Buckingham se abrirá al público por primera vez como parte de una visita guiada, informó el Royal Collection Trust, encargado de la apertura al público de las residencias reales del rey Carlos III.
La entrada dará acceso al corredor principal donde se exponen pinturas de Thomas Gainsborough, y a la sala contigua al famoso balcón desde donde la familia real saluda al público congregado en el "Mall".
