El frío reencuentro de los Cambridge y los Sussex en la misa de Isabel II

El príncipe William y Kate Middleton no cruzaron miradas con el príncipe Harry y Meghan Markle en la misa de acción de gracias en la catedral de San Pablo.
Como miembros senior de la familia real, os duques de Cambridge tuvieron un papel protagónico en la misa de acción de gracias.

Como dos parejas de extraños: así fue el esperado reencuentro en público de los duques de Cambridge, William y Kate, y los duques de Sussex, Harry y Meghan, en la misa de acción de gracias en honor a los 70 años de reinado de Isabel II.

Meghan y Harry llegaron minutos antes que los duques de Cambridge y tuvieron un recibimiento dividido entre aplausos y algunos abucheos.

El príncipe William y Kate Middleton, miembros senior de la familia real, fueron parte del último grupo en entrar a la iglesia, acompañando al príncipe Carlos y a Camila, duquesa de Cornwall, con quienes caminaron por la nave central de la catedral antes de tomar sus lugares en el ala derecha del lugar, junto a la princesa Ana.

Los duques de Sussex se sentaron en la segunda fila del ala izquierda de la catedral, junto a las hijas del príncipe Andrés y sus respectivos esposos.

El príncipe Harry y Meghan Markle ya estaban sentados para entonces, cerca da la princesa Eugenia y su esposo Jack Brooksbank, con quienes tienen una cercana relación.

El príncipe Carlos conversa animado con Kate Middleton dentro de la catedral de San Pablo, mismo lugar donde en 1981 se casó con la princesa Diana.

En ningún momento cruzaron miradas, ni al entrar los duques de Cambridge –tanto William y Kate como Harry mantuvieron la mirada fija hacia el frente– ni al finalizar el servicio religioso, cuando los Sussex pasaron algunos momentos con Peter Phillips y Zara y Mike Tindall, primos mayores de Harry.

William y Kate tomaron asiento junto a la princesa Ana, única hija de Isabel II.

La llegada de cada pareja a la catedral fue muy distinta: los duques de Cambridge fueron los más aplaudidos, mientras que en el caso de los Sussex hubo algunos abucheos. Esto pudo haber influido en su actitud general: aunque ambas parejas se mostraron sonrientes, los Cambridge se veían más relajados, y los Sussex ligeramente tensos.

William y Kate fueron los integrantes de la familia real más aplaudidos en su llegada a San Pablo.

Fue también en un servicio religioso cuando los Cambridge y los Sussex estuvieron en un evento público juntos por última vez, en la misa por el Commonwealth en marzo de 2020, poco antes del famoso Megxit en el que Harry y Meghan decidieron dejar su vida de royals para mudarse a Estados Unidos.

Los duques de Sussex se mostraron ligeramente tensos en su avance por la catedral.

La gran ausente fue, sin duda, la reina Isabel, quien canceló horas antes su participación dado que tuvo “un cierto malestar” tras el ajetreo de la primera jornada de su Jubileo. Tampoco estuvo el polémico príncipe Andrés, pues ayer se reveló que tiene covid, lo que podría mantenerlo alejado del resto de los festejos.

Al finalizar el servicio, los duques platicaron con Peter Phillips, nieto mayor de la reina, y Zara Tindall.