Según informó The Telegraph Tiggy Legge-Bourke, ex niñera de los príncipes William y Harry, ha recibido de la BBC una cantidad cercana a las 100 mil libras (casi 3 millones de pesos), como indemnización por haber sido víctima de las mentiras que su reportero, Martin Bashir, le dijo a Lady Di para convencerla de darle la famosa "entrevista del siglo" en 1995.
El periodista le aseguró a la princesa Diana que la niñera de sus hijos había tenido una aventura con su esposo, el príncipe Carlos, tanto así que le dijo que estaba enamorado de ella y habían tenido unas vacaciones secretas.
Además, para hacer más creíble su información, le contó que Tiggy había quedado embarazada y hasta le mostró los supuestos recibos médicos del aborto que se habría practicado.
Todas las mentiras de Martin para lograr que la princesa Diana le diera la entrevista, quedaron al descubierto y bajo investigación apenas el año pasado, cuando el hermano de Lady Di, Charles Spencer lo acusó de haberlos engañado en aquel entonces.
"Tiggy Legge-Burke estuvo en el centro de la manipulación de Bashir, y es justo que el daño que se le hizo sea reconocido por la BBC", declaró una fuente al diario británico con respecto a la compensación.
Se sabe que la ex niñera sigue en contacto con William y Harry, tanto así que asistió a la boda de ambos y los eligió como padrinos de sus hijos, lo que muestra la cercana relación que tiene con ellos.
Una investigación independiente, que tomó seis meses, determinó en mayo que el periodista había usado "métodos engañosos" y es que, además de la anterior mentira de la niñera, también entregó documentos falsificados al hermano de Diana, que demostraban que su jefe de seguridad estaba vendiendo información sobre su hermana y familia a la prensa, todo con la intención de convencerlos en darle la entrevista, cometido que logró, como sabemos.
Dichos resultados de la investigación, redactados por el ex juez del Tribunal Supremo John Dyson, provocaron que la BBC pidiera "completas e incondicionales" disculpas, lo mismo que el periodista de 58 años, quien dijo: "Fue algo estúpido y es un acto que lamento profundamente".
Fue apenas la semana pasada que Scotland Yard confirmó su decisión de no abrir una investigación penal sobre la polémica entrevista de la princesa Diana.
La policía londinense ya había anunciado en marzo que no abriría una investigación, pero volvió a estudiar el caso tras la publicación en mayo del informe independiente de Dyson.
"Investigadores especializados evaluaron su contenido y examinaron detenidamente la ley", explicó la policía en un comunicado. Pero "no identificaron ningún indicio de actividad constitutiva de delito, por lo que no tomarán más medidas", precisó.
La entrevista, que se emitió en el célebre programa Panorama en 1995 ante una audiencia de 23 millones de personas, dio un fuerte impulso a la carrera de Martin Bashir.
Tras la exclusiva de aquel entonces, el periodista continuó su carrera en Estados Unidos antes de regresar a Reino Unido para trabajar en la BBC y, justo a mediados de mayo de este año, después de haberse revelado la investigación privada, la BBC anunció que Bashir, encargado de la cobertura religiosa de la cadena pública desde 2016, dejaba la empresa por motivos de salud.
La cadena de televisión británica, además de mandar cartas de disculpa a los familiares de Diana, en agosto comunicó su intención de enmendar el error haciendo una donación de más de un millón y medio de euros a alguna organización altruista elegida por la familia real.