En 1946,
pidió la mano de la entonces princesa Isabel, así que, como parte del compromiso, el hombre de 25 años confió en el joyero londinense Philip Antrobus para que hiciera el anillo, pero también un brazalete de diamantes de inspiración art déco ¿Cuál es la historia detrás de esta pieza?
La princesa Alicia de Battenberg, mamá de Felipe había recibido de parte de sus tíos, el zar Nicolas II de Rusia y su esposa, la zarina Alexandra, una tiara de diamantes de aguamarinas, cuando se casó con el príncipe Andrés de Grecia en 1903.
Así que, cuando llegó el momento de hacer el encargo al joyero,
para que se confeccionara tanto el anillo de compromiso, como el brazalete de bodas Edimburgo, que recibió su esposa.La pieza tiene un diseño geométrico y tiene tres grandes diamantes tallados en blanco brillante, con tres eslabones cuadrados conectados por secciones verticales montadas en platino. Aunque en el joyero de la reina Isabel II todas las piezas tienen un gran significado, podría decirse que este brazalete es uno de sus favoritos, por el romántico significado.
Y es que, durante sus 73 años de matrimonio, se le ha visto usándolo en muchas ocasiones, incluyendo su aniversario de bodas de plata en 1972 y su retrato oficial del Jubileo de Diamante de 2012.
Esta pieza no la había usado ningún otro miembro de la familia real, hasta que Kate Middleton lo hizo en 2015, durante el banquete de estado para el presidente de China, Xi Jinping.
Dos años después, la duquesa de Cambridge nuevamente lo usó, ahora en la ceremonia de los premios BAFTA.