Cuando se publicó que la esposa del príncipe Harry había gastado poco más de un millón de dólares en ropa en su primer año dentro de la familia real, causó gran polémica en el Reino Unido. La mayoría de los ciudadanos calificaban estos gastos como innecesarios.
Por si fuera poco,
, comenzó a reutilizar muchas prendas de su armario, hecho que no pasó desapercibido pues aunque frecuentemente recicla piezas, ahora era evidente que lo hacía con un propósito.Parece que el mensaje llegó claramente a su destinatario y ahora Meghan Markle quiere “enderezar” el camino hacia la austeridad que tanto pregona con el ejemplo la reina Isabel II.
El pasado sábado en el Royal British Legion Festival of Remembrance en el Royal Albert Hall, no sólo repitió el abrigo de la diseñadora Stella McCartney de 36, 318 pesos que estrenó en enero pasado, sino que lució un vestido low cost de la tienda departamental Marks & Spencer de 1,300 pesos, modelo Double Crepe Bodycon. Es hasta ahora que se conocen los datos de esta prenda.
La Duquesa de Sussex poco a poco va aprendiendo el complicado oficio de ser una royal y estar expuesta 24/24 ante el ojo público. Eso no es poco, pero lo importante es que Meghan Markle está poniendo todo su empeño.