Fue la única hija del mandatario estadounidense que asistió junto a Melania a la “Presentación del pavo”, tradición que data de finales del siglo XIX y principios del XX, en donde los presidentes recibían un ave como regalo particular de Henry Vose, un criador de pavos de la Rhode Island. Actualmente, esta ceremonia se ha convertido en toda práctica institucional llevada en la Casa Blanca.
En este 2019, Donald Trump sólo estuvo acompañado de su esposa Melania que asistió con un abrigo tipo gabardina hasta las rodillas de ante marrón, con doble abotonadura y cinturón que combió con una botas del mismo color y material, mientras que Tiffany Trump se visitó con un jersey negro y por encima un abrigo de la diseñadora Taoray Wang de lana azul cruzado, el cual coordinó con un collar de perlas de Chanel, opacando por completo a la primera dama estadounidense.
La joven que estudia derecho en la Universidad de Georgetown es hija de Marla Maples, la segunda esposa de Trump y asistió junto a su novio Michael Boulos, honor que recibió por ser la única hija del empresario en asistir a este ritual, el cual comenzó oficialmente en la presidencia de Ronald Reagan en 1987, cuando al recibir el pavo, en forma de broma lo perdonó para tratar de desviar las preguntas sobre si consideraría el perdón para Oliver North, un militar que fue declaro culpable por gestionar el caso Irán-Contra, en donde altos funcionarios del gobierno estadounidense permitieron la venta de armas al país árabe, el cual tenía un embargo armamentístico y a la resistencia nicaragüense.