Enclavado entre las dunas y las olas del Mar de Cortés, Zadún, A Ritz-Carlton Reserve se alza como un santuario de lujo en San José del Cabo, donde el visitante puede consentir todos los sentidos.
Este resort, el primero de la colección Ritz-Carlton Reserve en México, es mucho más que un hotel: es una experiencia inmersiva que celebra el diseño mexicano contemporáneo y la riqueza cultural y gastronómica de nuestro país en un rincón paradisíaco de Baja California Sur.
Lo primero que notamos al llegar a Zadún —nombre inspirado en las dunas que rodean al resort— es que el lugar evoca la perfecta armonía entre el desierto y el mar.
Esta dualidad se refleja en la arquitectura y disposición del resort, que integra los paisajes naturales de elementos tierra y agua de tal forma que la transición de uno a otro se siente como una invitación a dejar que la mirada se adentre en el azul profundo y la piel se refresque con la brisa marina tras descender de las cálidas crestas de las dunas.
Y es que, desde la terraza de cualquiera de sus 113 habitaciones y suites, muchas con piscina privada, se puede contemplar el espectáculo infinito del Mar de Cortés mientras cae el sol o aparece la luna, en un ambiente de absoluta privacidad; aunque lo mejor es caminar a la tranquila playa a relajarse ante el movimiento infinito de las olas.
Si algo nos llevamos de esta visita a Zadún, A Ritz-Carlton Reserve es el servicio del tosoani, un asistente personal que acompaña a cada huésped para anticiparse a sus deseos, organizar experiencias personalizadas y garantizar que cada momento sea verdaderamente memorable.
Es un lujo silencioso, intuitivo y cálido, provisto por un equipo de profesionales de la hospitalidad que transmiten el gusto por compartir las maravillas del resort con cada visitante para que la estancia sea lo más relajada y placentera, no sólo por la variada oferta gastronómica de sus restaurantes con exquisitas propuestas de mar y tierra y el espectáculo que significa desayunar, comer o cenar frente al paisaje o bajo un cielo estrellado.
¿Tienes ganas de mariscos frescos o una carne a las brasas? Los restaurantes de Zadún tienen opciones para todos los paladares así como selección inmejorable de vinos, entre los que destacan distintas etiquetas de la península.
Además puedes combinar tus horas de descanso y relajación total con actividades como meditación, preparación de una bebida de cacao (así como una introducción a la historia de este ancestral elíxir mexicano) o la contemplación del firmamento por las noches con el apoyo de un telescopio (a nosotros nos tocó una espectacular luna llena) y la guía de las anfitrionas que conocen el mapa celeste como la palma de su mano.
Si este verano buscas vivir las vacaciones más exclusivas de tu vida en el Pacífico mexicano en compañía de todos tus seres queridos, Zadún, A Ritz-Carlton Reserve cuenta con la Grand Reserve Villa, que es la joya de la corona.
Se trata de un lugar con más de 10,000 pies cuadrados de elegancia desbordante con cinco habitaciones, salas de estar múltiples, cocina, gimnasio privado, jacuzzi y piscina. Todo, con el mar como telón de fondo.
El diseño de Zadún, A Ritz-Carlton Reserve es una oda a la creatividad y al arte mexicano que convierte el resort en un espacio sofisticado y acogedor con acentos provenientes de distintos rincones del país. Firmado por Uribekrayer, cada espacio ha sido meticulosamente curado con materiales y piezas provenientes de Oaxaca, Yucatán, Jalisco, Puebla y otras regiones. Textiles tejidos a mano, esculturas luminosas de artistas como Mónica Bizzarri y Raquel Charabatti, y una integración sensible con el entorno natural hacen de cada habitación una galería de arte vibrante.
Pero el alma de Zadún no termina en el diseño: su Spa Alkemia es un refugio de bienestar, considerado uno de los más innovadores de la región. Aún más, su propuesta gastronómica, actividades de aventura, experiencias culturales y sostenibilidad lo convierten en el destino ideal para quienes desean desconectarse del mundo y reconectarse consigo mismos en un entorno paradisíaco.
Zadún es más que un resort: es un destino en sí mismo. Este verano, si buscas vivir días de descanso y sofisticación en un lugar donde la exclusividad, la naturaleza, el arte y el servicio se entrelazan a la perfección, Zadún, A Ritz-Carlton Reserve en San José del Cabo es tu destino ideal.
Con la llegada del verano, las horas de sol se alargan, la brisa marina envuelve cada rincón del resort y el desierto cobra vida. Es el momento perfecto para que las familias creen recuerdos inolvidables y que los más pequeños de la casa despierten su curiosidad exploradora en un entorno seguro y lleno de inspiración.
Pensando en ellos, Zadún ha diseñado una experiencia que va más allá de las vacaciones: un verdadero viaje de descubrimiento y aventura.
Este 2025, Zadún presenta “Descubriendo La Baja”, un campamento de verano pensado para que los niños exploren los paisajes y misterios que hacen única a esta región. Durante cuatro semanas, los pequeños exploradores serán guiados por los Embajadores del Medio Ambiente de Zadún, quienes los acompañarán en actividades que combinan aprendizaje, diversión y contacto directo con la naturaleza.
La propuesta recrea el espíritu de una auténtica expedición en donde cada día es una nueva aventura con actividades divertidas y que transforman la relación de los pequeños con la naturaleza. El programa está diseñado para estimular la imaginación y el conocimiento a través de experiencias cuidadosamente seleccionadas. Los niños aprenderán sobre los ecosistemas, la fauna silvestre, las plantas endémicas y la cultura local, mientras participan en actividades que incluyen búsqueda de tesoros, fotografía subacuática, talleres nocturnos, rallys acuáticos, limpiezas de playa y avistamientos de aves. Cada jornada está pensada para crear momentos inolvidables y sembrar en ellos la semilla del amor y el respeto por la naturaleza.
El campamento se llevará a cabo en dos fechas: la primera será del 16 de junio al 29 de junio y la segunda del 21 de julio al 3 de agosto. La experiencia estará disponible en distintos formatos, adaptándose a las necesidades de cada familia: desde un solo día de aventura, hasta semanas completas de exploración, con tarifas que inician en $95 USD por día y paquetes que contemplan experiencias de dos, cinco o siete días.
