Four Seasons Resort Tamarindo, así se vive el paraíso en la Tierra

Con apenas un dos por ciento del área total desarrollada, el resort fue concebido para integrarse de manera armónica con el paisaje y desvanecerse en la naturaleza. Cada detalle del diseño refleja un México innovador que se fusiona con sus raíces ancestrales gracias a la visión de algunas de las firmas más respetadas del país.

Este lugar es perfecto para disfrutar de la naturaleza, relajarte con masajes y deleitarte con una experiencia gastronómica única. Cuando llegas al hotel, la vista es impresionante hacia el mar pacifico. No puedes dejar pasar de desayunar al restaurante Coyul, con la chef Elena Reygadas al mando, éste promete llevarte a un viaje culinario a través de la cocina mexicana moderna. Probar las delicias del lugar con productos frescos y locales es un must.

Además de la comida excepcional, el ambiente del restaurante suele ser acogedor y elegante, lo que lo convierte en un lugar ideal tanto para ocasiones especiales como para cenas informales.

Nacho es una taquería de tonos casuales situada junto a la piscina. El hotel tiene una finca donde se producen los alimentos que ofrecen, desde el maíz que se nixtamaliza para hacer tortillas hasta ingredientes recién cosechados como hongos, quelites y encurtidos; sin duda, Nacho permite degustar los más tradicionales sabores de México en su más fresca expresión.

Por la noche puedes ir al restaurante Sal. Con su enfoque en los productos del mar y un ambiente relajado, es ideal para disfrutar de una buena plática mientras contemplas las impresionantes puestas de sol junto al mar y sus relajantes olas.

El proyecto arquitectónico fue liderado por Víctor Legorreta y Mauricio Rocha junto al renombrado paisajista Mario Schjetnan. La curaduría del diseño de interiores del resort ha sido responsabilidad de Uribe Krayer y Estudio Esterlina, quienes han colaborado estrechamente con artesanos de diversas regiones de México a través de organizaciones como Ensamble Artesano y Taller Maya.

Los diseñadores Esrawe Studio y Bibiana Huber han dado forma al interiorismo de los restaurantes, mientras que el diseñador Kris Goyri ha creado una colección de uniformes para el personal del resort, inspirada en el simbolismo de las culturas prehispánicas.

Las suites son verdaderamente espectaculares y fueron diseñadas para brindar confort y lujo en cada momento de tu estancia, pues tienen una piscina infinita que ofrece vistas impresionantes al océano, ofreciendo una experiencia de inmersión en relajación mientras disfrutan del sol.

En Four Seasons Tamarindo cuidan cada detalle. En la regadera, el shampoo, el acondicionador, el gel de ducha y el jabón de manos son todos de la marca de fragancias Le Labo.

The Spa at Four Seasons Resort Tamarindo es una continuación del viaje de inmersión en la cultura y el paisaje de la región con tratamientos inspirados en los elementos naturales del vasto entorno y en crear genuinas conexiones espirituales.

A la llegada al spa, se percibe el aroma del copal proveniente de los árboles de la reserva y desde ahí empiezas a vivir la experiencia. Este lugar es perfecto para relajarte, dejarte consentir y enfocarte en el momento presente, además, tienen una amplia variedad de servicios que se adaptan a diferentes necesidades.

Un recorrido por los senderos naturales de Tamarindo en una bicicleta eléctrica con destino final hacia Playa Dorado, donde te espera un picnic a la orilla del mar, es lo mejor para concluir la experiencia.