En una edición de los Oscar marcada por la elegancia, los hombres de la alfombra roja demostraron que el estilo masculino está lejos de ser aburrido. Desde el clásico look black tie hasta los más atrevidos, esta noche nos dejó looks impecables que redefinen el vestir con elegancia y carácter.
¡Estos son los caballeros que captaron todas las miradas en la gala de los Premios de la Academia 2025!
Siempre en un estilo relajado y sencillo, Andrew Garfield usó una silueta clásica con toques contemporáneos. Su traje Gucci café con solapas satinadas elevó el look sin perder sobriedad. Un gran acierto fue complementarlo con una camisa desabotonada a tono para mantener el look monocromático. Garfield demostró que los detalles hacen la diferencia, añadiendo unos lentes y joyería sutil.
El actor de Heartstopper apostó por una versión más moderna del esmoquin tradicional. El traje de Giuliva Heritage en negro con una sutil silueta oversized en la solapa es impactante. Con un aire relajado pero innegablemente sofisticado, su look fue una prueba de que la simplicidad bien ejecutada nunca pasa desapercibida.
Coleman Domingo ha sabido convertir la alfombra roja en una extensión de su magnetismo. En esta ocasión, utilizó un conjunto en rojo vibrante de Valentino compuesto por un blazer de líneas angulares y un pantalón de caída perfecta. El actor, que ha demostrado un dominio absoluto del vestir, completó el look con unos lentes de sol.
Pocos actores tienen la capacidad de llevar un look tan inesperado con estilo como lo hace Timothée Chalamet. Su elección de un traje en un tono amarillo pastel, un color inusual, destacó entre la sobriedad predominante. El conjunto Givenchy es un recordatorio de que el riesgo cuando es auténtico es el mejor aliado del estilo.
Kieran Culkin optó por un traje negro con una camisa abierta del mismo color y una corbata de moño, demostrando que el clásico tux puede reinterpretarse sin perder sofisticación. Su elección capturó su esencia: moderno, relajado y con una seguridad que lo hace destacar sin necesidad exagerar.
Pocos actores llevan el esmoquin con tanta naturalidad como Adrien Brody. Para esta edición de los Oscar, el actor apostó por una versión impecable de Giorgio Armani con un moño clásico que evocaba las épocas doradas del cine. En un mar de tendencias arriesgadas, Brody recordó que lo clásico siempre es un acierto.
