Por eso existe el Holiday Glow Reset, un mini ritual de 10 minutos que no pretende cambiar tu vida, pero sí devolverte ese brillo que el fin de año te roba sin pedir permiso. Es corto, es realista y está respaldado por ciencia, no sólo por la fantasía de que con un serum todo se arregla. Aquí te dejamos la guía final para resetearte en tiempo récord y regresar a ti.
Holiday Glow Reset, el mini ritual de 10 minutos que necesitas en esta época festiva
Holiday Glow Reset suena a ese mini ritual que juras que no va a cambiar nada, pero que en realidad te regresa el alma al cuerpo después de semanas de comer, correr, trabajar, celebrar y repetir. Es ese momento de 10 minutos que se siente como apagar el ruido y prenderte tú. Y sí, funciona, según la Asociación Americana de Psicología, incluso pausas cortas de mindfulness bajan los niveles de estrés y mejoran el mood, y el Journal of Cosmetic Science explica que la combinación de hidratación y masaje facial activa la microcirculación y deja la piel con más luz. O sea, es ciencia, vibes y un poquito de magia navideña.
El ritual empieza antes de que empiece. Elige un espacio donde no te vaya a caer encima el caos como baño, recámara o literal tu coche estacionado, respira profundo y piensa que, por los próximos minutos, la única prioridad eres tú. Pon una luz tenue o abre tantito la cortina, la luz natural siempre ayuda a engañar al cerebro y sacarlo del modo agotamiento.
Primero, agua y en un vaso grande. Tu cuerpo te lo va a agradecer más que cualquier suero caro. Después, refresca la piel, una limpiadora suave y agua fría en los cachetes despiertan la microcirculación (Dermatology Times lo ha repetido mil veces). Cuando sientas ese mini shock rico, aplica tu hidratante favorito con las manos calientes. No necesitas herramientas fancy, tus dedos hacen un mejor trabajo del que crees. Haz movimientos ascendentes y un ligero drenaje hacia las orejas. Este simple gesto tiene respaldo del International Journal of Dermatology, que explica cómo el masaje facial reduce la tensión muscular y mejora la oxigenación. Básicamente, glow instantáneo.
Ahora viene la parte mental, la que nadie ve pero todos notan. Cierra los ojos 60 segundos y piensa en algo ultra simple, ¿qué quiero sentir hoy? No “qué tengo que hacer”, sino “qué quiero sentir”. Ligero, presente, guapo, enfocado, lo que sea. La Universidad de Harvard tiene años estudiando cómo la intención dirige la percepciones y mejora la autorregulación emocional. Y sí, en español significa: si decides que quieres sentirte bien, tienes más chance de lograrlo.
Para cerrar, un toque sensorial. Puede ser un spray facial con aroma suave, una vela, tu perfume favorito o un lip balm que te hace sentir cute. No necesitas justificarlo, el cerebro responde al placer inmediato, la dopamina es real y el Journal of Neuroscience lo respalda.
Cuando termines, no vas a salir convertida en hada luminosa, pero sí en una versión más despierta y más tuya. Ahí está el secreto del Holiday Glow Reset, no se trata de arreglarte, sino de recordarte. Diez minutos que cambian el ritmo del día, te regresan la cara post-fiestas y, sobre todo, te devuelven esa tranquilidad que brilla más que cualquier highlight. ¿Navidad? ¿Año Nuevo? Da igual. Tu glow depende más de ti que del calendario.