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México es campeón en la Copa de Oro

La Selección Mexicana se impuso a Estados Unidos con un marcador de 5-0 goles.
lun 27 julio 2009 07:51 AM
La Selección Mexicana se impuso a Estados Unidos con un marcador de 5-0 goles.
Copa de Oro La Selección Mexicana se impuso a Estados Unidos con un marcador de 5-0 goles. (Foto: Notimex)
Tuvieron que pasar más de diez años para que la selección de México "exorcizara los demonios" que más lo atormentaban.
Tuvieron que pasar más de diez años para que la selección de México "exorcizara los demonios" que más lo atormentaban.

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La selección de México ganó este domingo la Copa de Oro 2009 en Estados Unidos como si hubiera jugado de local, con un público mayoritariamente mexicano que disfrutó la goleda 5-0 del Tricolor.Alrededor del 80 por ciento de los 79 mil 156 asistentes al estadio de los Gigantes de Nueva York, ubicado en el vecino estado de Nueva Jersey, eran aficionados del equipo mexicano, que así festejaron el triunfo de su equipo. Antes de que comenzara el juego, en el estacionamiento se congregaron grupos de amigos y familias, muchas de las cuales asaban carne y tomaban cervezas. En el estadio, los aficionados de la selección mexicana a ratos coreaban "Olé, olé" los pases de los jugadores, y a veces gritaban "Sí se puede, sí se puede". En las gradas del recinto se veían personas con la cara pintada con la bandera de México, con máscaras típicas de luchadores, de monstruos y de animales. Además, se observaban aficionados con las camisetas verdes, clásica del combinado azteca, junto con las casacas rojiblancas de las Chivas de Guadalajara, las auriazules de los Pumas de la UNAM y las amarillas del América. Tampoco faltaron los mexicanos con sus enormes sombreros con la leyenda de México ni las imágenes de la Virgen de Guadalupe. Luego del tercer tanto mexicano, conseguido por el delantero del Arsenal inglés, Carlos Vela, el público comenzó a corear "Sí se pudo, sí se pudo". Tras el cuarto gol, de José Antonio Castro, el ambiente ya era de fiesta y las exclamaciones de "Cinco, cinco", en referencia a un quinto gol, parecían más bien un juego, hasta que cayó la última y definitiva anotación de Guillermo Franco. Durante la entrega de las medallas de campeón, el público gritó de nuevo "Sí se pudo, sí se pudo", y era imposible decir que el estadio no estaba en México, debido a la algarabía y la fiesta.

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