Este martes, el Festival de Cine de Cannes se pronunció ante el conflicto en Ucrania y anunció que prohibirá a las delegaciones rusas y cualquier vínculo con el Kremlin para su edición número 75, la cual se celebrará en mayo próximo.
“Puesto que el mundo ha sido golpeado por una fuerte crisis en la que una parte de Europa se encuentra en estado de guerra, el Festival de Cannes desea extender todo su apoyo al pueblo de Ucrania y a todos los que se encuentran en su territorio”, se puede leer en un comunicado difundido por los organizadores.
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En dicho documento añadieron que “durante este invierno de 2022, el Festival de Cannes ha entrado en su fase de preparación. A menos que la guerra de asalto termine en condiciones que satisfagan al pueblo ucraniano, se ha decidido que no daremos la bienvenida a las delegaciones oficiales rusas ni aceptaremos la presencia de ninguna persona vinculada al gobierno ruso”.
El certamen fílmico, el más importante del mercado europeo, dejó en claro que las delegaciones oficiales quedan prohibidas pero que los realizadores rusos podrán participar de forma independiente si así lo desean. Aún no queda claro bajo qué circunstancias.
La medida determinante ha despertado todo tipo de reacciones. Realizadores ucranianos como Sergei Loznitsa reclamaron medidas mucho más tajantes por parte de su gremio europeo, sin embargo han declarado que su intención no era desatar un boicot al cine ruso.
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Realizadores rusos, por su parte, apelan a que este boicot silencia las voces que, en muchos casos, son contrarias al régimen. Tal es el caso de Kirill Serebrennikov, quien se ha presentado en Cannes con proyectos como Petrov’s Flu y Leto, y se esperaba que este año estuviera de vuelta con Tchaikovsky’s Wife.
La afrenta de la industria cinematográfica internacional ante la guerra ha lanzado a los estudios como Disney, Warner Bros y Sony Pictures a cancelar sus estrenos, incluidos los golpes de taquilla "Turning Red", "The Batman" y "Morbius".
“Fiel a su historia que comenzó en 1939 en resistencia a la dictadura fascista y nazi, el Festival de Cannes siempre estará al servicio de los artistas y profesionales de la industria que alzan la voz para denunciar la violencia, la represión y las injusticias, con el propósito principal de defender la paz y la libertad” finaliza el documento firmado por el equipo del Festival de Cine de Cannes.
