Si vives en la ciudad de México y has pasado por Reforma seguramente ubicas perfecto la casa de Irma Serrano, mejor conocida como "La Tigresa".
Entre pisos de mosaicos blanco y negro (los cuales estuvieron en algún momento en el Castillo de Chapultepec), un piano que perteneció a Maximiliano y un comedor que alguno vez vivió en Los Pinos, ahora se encuentra un espacio perfecto para olvidarte del mundo exterior y conectar con tus sentidos.
Cielo Serrano Spa es el lugar de donde saldrás perfecta de pies a cabeza y en un estado zen, pero sobre todo vivirás una experiencia llena de lujo y exclusividad ya que la casa sigue casi intacta (con los mismos muebles y pisos) pero ahora con cuartos específicos para consentirte. Claro que cuando me invitaron a conocerlo mi respuesta inmediata fue "sí".
El tratamiento que más disfruté fue el de Crioterapia; cuando sepas de qué se trata seguramente también vas a morir por probarlo.
Consiste en entrar a una especie de cilindro que te envolverá (solamente del pecho hacia abajo) con temperaturas de -180 grados. Suena a frío extremo pero tranquila, no hay nada que temer ya que esto solamente dura tres minutos y los resultados realmente valen la pena. Entre ellos está el acelerar el proceso antiinflamatorio, te ayuda a dormir mejor, a desestresarte mientras aumenta la energía.
Estéticamente hablando ayuda a tonificar la piel, mejora la circulación sanguínea, quema calorías y, la mejor parte, ayuda a retrasar los signos de la edad. No es un tratamiento milagroso y la constancia es la clave, pues a partir de la sesión número 10 es cuando empiezas a ver un verdadero cambio en tu cuerpo. Pero no puedo negar que basta solo una vez para sentirte mucho mejor, descansada y con más energía, además segregas endorfinas, dopaminas y serotoninas.
Presoterapia, carboxiterapia, estimulación de colágeno (una cama parecida a las de bronceado que te ayuda a estimular durante 15 minutos), masajes y faciales son algunos de los servicios que ofrecen en Cielo Serrano Spa, así como los rituales que te ayudan a conectar cuerpo y emociones. Y ni hablar de los espacios en los que puedes estar antes y después de tu tratamiento mientras disfrutas de un té y frutos rojos.
Dolores, Susy, la doctora Laura, Lili y Erika son algunas de las personas que te recibirán y que se harán cargo de que tu tratamiento o servicio sea súper exclusivo y toda una experiencia que seguramente vas a querer vivir más de una vez.