Letizia de Asturias: una madre muy exigente
Lo más importante para los Príncipes de Asturias, es que su hijas, Leonor y Sofía, crezcan en un mundo lejos de la prensa y que lleven una vida lo más normal posible. Pero la vida de la Infanta Leonor ya esta un poco determinada tanto por sus padres como por el Palacio de Zarzuela por ser la segunda en la línea de sucesión al trono de España.
Desde que cumplió tres años y medio asiste al Colegio Santa María de los Rosales, éste fue elegido porque es el colegio al que acudió su padre, Felipe, y por la cercanía a su domicilio. Dicho colegio ofrece una formación bastante personalizada con clases de pocos alumnos y con un tutor para cada uno. Existen talleres de pintura, dibujo, cine, teatro, ballet, danza española, chino mandarín e inglés.
En el colegio no sólo se aprenden asignaturas, también valores y modales. Les enseñan cómo comer, portar un uniforme y aunque sea un centro laico Leonor y Sofía acuden a clases de religión ya que más adelante, harán la comunión, como cualquier miembro de la Familia Real. Además, allí le dan mucha importancia al deporte, se practica el hockey, fútbol, basquetbol, tenis y baile.
Es unas de las escuelas privadas más caras de Madrid. Los príncipes pagan alrededor de 1,000 euros por cada niña, más casi 600 euros mensuales para los seguros y el comedor. Los alumnos de la escuela saben que ahí asisten las nietas de los Reyes pero intentan llevarlo de la mejor manera posible y por eso las medidas para la seguridad de las niñas son lo más discretas posibles.
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Letizia es mucho más conservadora de lo que se pudiera imaginar. No soporta la permisividad y educa a sus hijas de una manera tradicional. A petición de Letizia no se pueden tomar fotos de las niñas en la escuela ni que sus compañeros tomen fotos con su celular, esto es por el miedo a que se difundan. Por su parte Leonor es una alumna muy aplicada, es muy buena en inglés, asiste a clases de ballet y estudia la historia de los Borbón.
Está previsto que como futura reina, Leonor, se marche a Estados Unidos a realizar el bachillerato. A su regreso a España pasará por el ejército, formación necesaria como futura Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. Después irá a la universidad, seguramente en Madrid, donde seguramente estudiará Derecho y Economía.
A sus casi ocho años, es una niña que se muestra seria y formal en los actos públicos, donde observa todo a gran detalle y se preocupa de que su hermana Sofía obedezca. Leonor es bastante observadora, curiosa, sociable y perspicaz, mientras que Sofía posee una inteligencia mucho más intuitiva. Además, es la que manda en la casa, normalmente de adueña de la televisión y se impone a su hermana en la elección del programa, le gusta mucho la tecnología y pasa horas en internet, claro, bajo la supervisión cercana de su madre.
De lunes a viernes, cuando sus padres están trabajando, las niñas cuentan con dos nanas; de las cuales una sólo les habla en inglés. Por tal motivo las dos son casi bilingües. Además la Reina, desde que nacieron, sólo se dirige a ellas en este idioma, que es, además, en el que hablan los Borbón y Grecia cuando se reúnen. Además solamente tienen permitido ver las películas en idioma original y su madre les lee cuentos en inglés.
Así mismo su madre, la Princesa de Asturias, ha hecho hincapié en que también dominen las lenguas oficiales de España: gallego, euskera y catalán. Precisamente suelen cantar en catalán junto a su tía Telma Ortiz. Además estudian chino mandarín dos veces por semana, contrario a su padre que eligió el francés en su momento.
Aunque pueden ir a casa de sus amigas, la única condición que pone Letizia es que no se refieran a ellas como Su Alteza, prefiere que les digan por su nombre de pila. Ella cree que es la mejor manera de hacer que sus hijas vivan en el mundo real. También tienen prohibido llorar en público y aceptar regalos y aunque están chiquitas ellas ya saben qué tienen que hacer. Algo que disfrutan es comer dulces, pero Letizia incluso se acercó en alguna ocasión a la psicóloga infantil Rocío Ramos-Paul para ver cómo les podía quitar ese gusto, a lo que la supernanny le contesto que no fuera tan intransigente.
Durante el tiempo libre la infanta Sofía prefiere navegar en la web y Leonor prefiere pasear a los perros o acercarse a la cocina para preparar algo junto a su mamá. Además frecuentan a su familia de ambos lados por el lado de los Ortiz, Letizia recurre a su madre, Paloma Rocasolano, para que se ocupe de las pequeñas cuando tiene que salir del país y por su parte el Príncipe Felipe las lleva a visitar al Rey, su abuelo, una vez a la semana.
No cabe duda de que a pesar de que Letizia no creció en un Palacio sabe que es lo que necesitan sus hijas segunda y tercera en la línea de sucesión al trono. Con el simple hecho de verlas nos damos cuenta de lo educadas que son y que además siguen teniendo la chispa que cualquier otra niña de su edad debe tener.
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