Después de años de distanciamiento y tensiones públicas, el príncipe Harry hizo un nuevo gesto de acercamiento hacia la familia real británica.
De acuerdo con reportes recientes de Page Six, el duque de Sussex ofreció compartir con el Palacio su calendario de apariciones públicas con el objetivo de evitar coincidencias en los actos oficiales del rey Carlos III y del príncipe William.
Este movimiento ha sido interpretado como una señal de que Harry busca bajar el tono de los conflictos mediáticos y acercarse nuevamente a su padre y hermano, con quienes mantiene una relación rota desde su salida de la familia real en 2020.
La propuesta de Harry se centra en facilitar una coordinación anticipada de sus compromisos públicos, de modo que no interfieran ni opaquen los eventos programados por la realeza.
La propuesta es supuestamente una forma de acabar con las afirmaciones de que los Sussex están intentando robarle la atención a la realeza británica.
La idea surgió tras episodios recientes en los que su presencia en ciertos actos coincidió con importantes momentos oficiales, como su visita a África mientras se revelaba el retrato oficial de la reina Camila.
Para evitar que se repitan este tipo de situaciones, Harry pueso sobre la mesa un sistema de comunicación directa con los equipos del rey y del heredero al trono. El ofrecimiento fue transmitido durante una reunión privada que tuvo lugar en Londres el pasado 9 de julio entre su entorno y representantes de la Casa Real. Aunque el gesto fue recibido con interés por el equipo del rey, aún no se ha hecho público si habrá una respuesta formal por parte de la corona.
A pesar del aparente avance con su padre, el verdadero obstáculo sigue siendo el príncipe William. Fuentes cercanas a la familia afirman que el heredero al trono no fue informado ni participó en la reciente reunión de acercamiento, lo que sugiere que las heridas entre los hermanos siguen abiertas. William, según allegados, aún desconfía de las intenciones de Harry y no está convencido de su compromiso con una reconciliación genuina.
Harry tiene previsto regresar al Reino Unido en septiembre para asistir a un evento benéfico de la organización WellChild. Aunque por ahora no se ha confirmado ningún encuentro con su padre o hermano, esta visita podría convertirse en una nueva oportunidad para reconstruir puentes rotos.
Mientras tanto, el gesto del duque de Sussex es visto como un paso pequeño, pero significativo, en una relación que ha estado marcada por la desconfianza, las declaraciones públicas y años de distancia emocional. El tiempo dirá si este intento de paz encuentra eco dentro de la institución más tradicional del Reino Unido.
