En los últimos meses el primogénito de los duques de Sussex se ha convertido en el miembro más mediático de la monarquía británica, debido precisamente a las pocas imágenes que el príncipe Harry y Meghan Markle han querido compartido del pequeño y a sus escasas apariciones públicas, robándole indirectamente parte del protagonismo a su primo, el príncipe Louis, que hasta el nacimiento de Archie era el más pequeño de la familia real.
Sin embargo, este martes la duquesa de Cambridge se encargó de dar noticias sobre su hijo menor, de 18 meses, durante la visita que realizó a una granja de Buckinghamshire para reunirse con un grupo de niños a los que ayudó a elegir árboles de navidad y realizar adornos caseros.
Uno de los pequeños consiguió llamar especialmente su atención con sus ocurrencias y su empeño por darle la mano mientras recorrían la propiedad, consiguiendo que ella le confesara: "Me recuerdas mucho a mi hijo pequeño, Louis. Él también dice todo el rato 'yo, yo, yo' y quiere acompañarme a todas partes".
La esposa del príncipe Guillermo realizó esa visita como parte de su nuevo labor como patrona de la organización benéfica Family Action, que ofrece apoyo a familias en situaciones complicadas que incluyen dificultades financieros o problemas de adicción. Anteriormente la reina Isabel II ocupaba ese papel, pero recientemente decidió cedérselo a su nieta política para que ella continuara su trabajo de cara al futuro.