Las extrañas costumbres navideñas de la familia real británica

Budines, tarjetas autografiadas e intercambio de regalos a la hora del té. Esto acostumbran los royals ingleses en las fiestas de fin de año
Ésta fue la primera Navidad que meghan Markle pasó con la familia real.

Hoy es Noche Buena y mañana Navidad y, como casi todo el mundo en la cultura occidental, la realeza no está exenta de la celebraciones. Tal es el caso de la

, que en estas fechas tiene varias costumbres extrañas.

La primera de ellas es que celebra la Navidad como nosotros, es decir, el 24 de diciembre… pero en la tarde y ¡a la hora del té!

Así es, el 24 en la tardecita toda la familia se reúne en un salón donde hay varias mesas plegables sobre las cuales están los

. Cuando todos los miembros de la familia están reunidos, empieza entonces el intercambio de presentes.

Los palacios londinenses no los usan para festejar la Navidad. En cambio, la familia pasa las vacaciones decembrinas en una casa ubicada en Norfolk llamada Sandringham House.

Cuando los hijos de la reina eran niños (en la época de los 60), pasaban las fiestas en el castillo de Windsord, pero desde 1988 cambiaron a Sandringham.

¿La Reina pone árbol navideño?

Los empleados de Palacio son quienes ponen el árbol navideño, pero los miembros de la realeza contribuyen en su adorno. De hecho, ellos son quienes le dan los toques finales, a excepción de la reina, a quien no le gusta hacerlo.

A la reina Isabel II no le gusta poner el Árbol.

El 25 de diciembre, Isabel II y el resto de la familia acuden a la iglesia de St Mary Magdalene, en Sandringham, costumbre que instauró la reina Victoria.

Otra costumbre es que Isabel II y su marido, el duque de Edimburgo, envían una tarjeta navideña donde comparten sus mejores deseos.

Las tarjetas (conocidas como The Royal Christmas Card) generalmente incluyen una foto familiar y son firmadas por la reina y su esposo.

Se calcula que se mandan cerca de 750 tarjetas que reciben familiares, amigos y sus empleados más allegados, además los Primeros Ministros de los países miembros del Commonwealth, generales y altos comisionados.

Y seguro que el servicio postal está muy activo, pues además, el duque de Edimburgo envía unas 200 tarjetas más a distintas organizaciones con las que participa, además de regimientos militares.

Regalos reales

Isabel II acostumbra obsequiar en estas fechas uno de esos postres a los empleados del Palacio de Buckingham, el Castillo de Windsor El Palacio Postal y el de Policía.

Su abuelo, el rey Jorge V y su padre, el rey Jorge VI fueron los que iniciaron esa tradición que, por lo visto, le gusta a la reina.

Otro de los regalos que da la Reina son árboles de Navidad, que dona a la Abadía de Westminster, la Catedral de San Pablo, la Catedral de San Giles y la iglesia de Canongate, en Edimburgo.

Por supuesto, las iglesias y las escuelas de Sandringham también reciben un árbol real.