Kate Middleton ha llegado hoy a la boda del príncipe Harry y Meghan Markle te parece familiar es porque lo es. No porque se trate de su signature look o porque sea extremadamente fiel a su estilo sino porque lo ha usado antes y en dos ocasiones.
Se trata de un abrigo-vestido en palo de rosa firmado por la casa fetiche de Kate, Alexander McQueen. Su sombrero fue diseñado por Philip Treacy y sus zapatos son un par de Jimmy Choo. Con este ensamble Kate ha entrado a la capilla de St. George tomada de la mano de la pequeña princesa Charlotte.
Las ocasiones anteriores en que Kate llevó este vestido fue en el bautizo de Charlotte y en el cumpleaños de la reina.
El hecho de que Kate reutilizara vestido ha generado controversia, muchos han elogiado que haya reutilizado y otros argumentan que un evento de esta magnitud exigía un nuevo look.