El joven prodigio italiano no solo hizo historia en Wimbledon por su talento, sino por llevar a la cancha la maleta más codiciada del torneo y, probablemente, del verano. Creada en exclusiva para él, fruto de la reciente y especular colaboración entre Gucci y Head. Bajo los ojos atentos de los amantes del tenis y la moda.
La historia de este icónico accesorio se remonta al año pasado, cuando Gucci presentó en Wimbledon la primera bolsa personalizada para su embajador, Sinner. Desde entonces, la maison y la marca deportiva han continuado perfeccionando un diseño que combina la máxima funcionalidad con el irresistible sello luxury italiano.