Conocemos a Mía desde que nació, literalmente. Desde muy chica se ha preparado para consolidarse en el mundo de la música. Aunque la hemos visto participar en el teatro y en algunos proyectos musicales, su nuevo sencillo "Diablo" se erige como el punto de quiebre hacia una nueva etapa artística. La canción representa la transición y marca su entrada en el mundo musical de manera profesional con un concepto que la define por completo como artista.
El debut musical de Mía Rubín, hija de Andrea Legarreta y Erik Rubín
La cantante describe el proceso creativo de "Diablo" como “Algo mágico. Ha sido increíble poder encontrar mi identidad y siento que con Diablo logré hacerlo porque estábamos en un taller de composición las personas que escribimos ”Diablo”, que son César Miranda, José Miguel Alfaro, que es uno de mis productores, mi papá, que también es productor y coautor, y yo, la letra, armonía, melodía y la canción parecía que nos la estaban dictando”.
El proceso de grabación, según Mía, es lo que más disfruta. Con "Diablo", recuerda con cariño la inspiración que la llevó a hacer tomas enteras, destacando la conexión única que experimentó con este sencillo. Mia destaca la importancia de este proceso, ya que cada canción es distinta y ofrece oportunidades únicas para expresarse.
Trabajar con su papá, Erik Rubin, en este proyecto fue una experiencia muy gratificante para la mayor de las Rubin Legarreta. Pues nos asegura que ella y Erik han manejado la colaboración de manera saludable. “Tenemos una muy buena conexión, obviamente luego tenemos nuestros desacuerdos. Sin embargo, tengo una persona al lado mío que tiene muchas tablas, años de experiencia, que me está guiando y que me está sirviendo muchísimo en este descubrimiento artístico”, nos asegura Mía.
(Cortesía)
"Diablo" tiene raíces en la inspiración de Mia, que proviene de diversas fuentes, incluyendo el libro Satán, la autobiografía. La canción explora temas como el ego y el amor tóxico. ”Habla que el mismísimo Diablo puede llegar a ser uno mismo, el ego y de cómo nosotros nos perdemos en nosotros mismos y que podemos llegar a destruirnos. Pero también es una canción de doble connotación, que puede hablar de un amor dependiente, tóxico, del cual no puedes escapar. Para muchas de estas canciones he utilizado ese personaje que está atormentado, que ha sufrido desamor, que ha sufrido odio con ella misma, con el mundo, pero también hay canciones en las cuales me baso en mis propias experiencias”, nos dice.
Mía adelanta que este es solo el inicio de una serie de proyectos musicales que incluyen más canciones de bolero y otros géneros que reflejan sus raíces latinas. La artista asegura que este año estará lleno de música nueva y emocionante.