protagonizan uno de los matrimonios más mediáticos del mundo del espectáculo, y aunque recientemente los rumores sobre una posible separación han empañado su relación, juntos han demostrando siempre que el amor los ha mantenido unidos.
Pero en medio de los señalamientos que aseguran que durante la cuarentena, Kim y Kanye estaba pasando por algunos problemas y que incluso estaban viviendo en lados opuestos de su enorme mansión, este fin de semana, la pareja celebró su sexto aniversario de bodas.
A través de su perfil de Instagram, Kim recordó su aniversario de bodas con una emotiva fotografía en la que aparece abrazada de Kanye y besando su mejilla. La publicación fue acompañada de un breve, pero significativo mensaje.
“Seis años menos; para siempre ir hasta el final”, escribió Kim en su publicación que ha acumulado más de 2 millones de likes y miles de comentarios.
Junto a la postal, la socialité escribió unas lindas palabras para su marido, sorprendiendo a algunos de sus seguidores, quienes cuestionaron lo puntual que fue Kim en sus palabras. Muy diferente a lo que normalmente hace cuando se trata de fechas especiales, cuando suele hacer dedicatorias más extensas.
Por su parte, Kanye West recordó el día que le pidió matrimonio a Kim con un emotivo video publicado en su cuenta de Instagram. “La vida es como un video”, escribió el artista como descripción de su clip.
Tal y como sucede en los festejos del clan Kardashian-Jenner, la boda de Kim y Kanye fue espectacular y memorable. La pareja se juró amor eterno en una romántica finca de Florencia, Italia, teniendo como testigos a toda la familia y en especial a su hija North West, que entonces estaba a punto de cumplir 1 año.
En aquella ocasión, Kim Kardashian lució un hermoso vestido de Givenchy, diseñado por Riccardo Tisci, el cual fue hecho a la medida y con el que resaltaba sus curvas. El diseño era corte sirena y con transparencias en encaje.
A la fiesta acudieron estrellas como Jhon Legend, Tyga, Jaden Smith, Chrissy Teigen y el tenor Andrea Bocelli, quien fue el encargado de cantar el Ave Maria, mientras Kim caminaba hacia el altar.