"Yo no siento una libertad muy grande a la hora de hablar y a la hora de compartir cómo se sienten. Y eso sí es algo que me inquieta, porque creo que en 2019 en cualquier lugar del mundo alguien debería sentirse libre para hablar", afirmó durante la conferencia de prensa de presentación del filme.
La actriz, que interpreta a la esposa de un espía cubano detenido en Estados Unidos en los años 1990, habla en el filme con un notable acento cubano, lo que la obligó a meses de preparación.
"La gente de Cuba es maravillosa", dijo, "te enamora por su corazón, los valores y la humildad", añadió.
Sin embargo, admitió que le costó entender a su personaje, una defensora a toda costa del régimen, porque "no comparto su extremismo, no soy de extremismos", explicó.
Cruz reconoció que la historia de Cuba es "complicada", ya que la película cuenta un hecho real ocurrido durante los años 1990, cuando fue creada una red de espionaje por el régimen comunista para frenar los atentados en la isla organizados por grupos anticastristas de Miami.
