Quién es... Fernando Noriega

- ¿Qué te gustaba hacer de niño?

Como soy el menor de los hermanos, me tocaba jugar solo y por esta situación usaba mucho la imaginación. Siempre estaba inventando cosas, desde entonces hacía obras de teatro. También tenía una avalancha que me encantaba, y era mascota de los equipos deportivos de mis hermanas.

- Cuéntanos alguna travesura que hayas hecho de niño...

Me gustaba jugar a los incendios, de repente prendía mis juguetes, pero una vez me fue muy mal porque estábamos en un crucero en el Caribe, llegamos a una isla y toda mi familia se bajó, yo me quedé y se me hizo fácil prender una caja con mis muñecos adentro, obviamente sonó la alarma y me gané un súper regaño.

- ¿Cuáles han sido tus mejores vacaciones?

Un crucero a Disney que hice hace poco, no de niño, con mis 11 sobrinos y toda mi familia. Es padrísimo redescubrir todo lo que de niño te encantaba y darte cuenta que aún existe ese chavito que se maravillaba por todo lo nuevo.

- ¿Quién era tu superhéroe favorito?

Era muy fan de los Thundercats.

- ¿Cuál consideras que ha sido tu mayor reto?

El proyecto que me ha resultado un reto y una gran satisfacción fue mi primera película en Estados Unidos, tanto por el hecho de tener la experiencia de trabajar fuera de mi país haciendo cine, oportunidad que no había tenido, como por romper con la barrera del lenguaje. Además, enfrentarme con una producción conformada por personas de todo el mundo y compartir pantalla con Elsa Pataky o Eric Mabius fue sensacional .

- ¿Hay algún personaje que te gustaría interpretar?

Me encantaría hacer a Stanley Kowalski, de ‘Un tranvía llamado deseo', es un gran personaje.

- Si no hubieras sido actor, ¿qué otra profesión hubieras elegido?

Fotógrafo, estaba estudiando Comunicación y Fotografía, pero la dejé por la actuación; me gustaría retomar la foto.

- Define a tu pareja ideal...

Que me haga reír. Al paso de los años lo que más importa, más allá del físico o el nivel socioeconómico, es que podamos reír juntos.

- ¿Cómo sería tu cita perfecta?

La no planeada, que podría consistir en una comida, vino, algo muy espontáneo.

- Si tuvieras 100 millones de dólares, ¿qué comprarías?

Ahorraría porque en esta carrera no se sabe bien a bien el futuro, de repente hay trabajo y de repente no. También invertiría en un restaurante u hotel, y compraría una casa en Los Ángeles; me encantaría invertir, si no en cine, sí en una serie.

- ¿Qué tipo de comida te gusta?

Soy súper tragón. La mexicana me encanta.

- ¿Qué te gustaría que dijera tu epitafio?

Vivió feliz.

- A estas alturas de tu vida y tu carrera, ¿aún le tienes miedo a algo?

Al fracaso, que es muy relativo, tú te mides; básicamente a no llenar mis expectativas. También a la soledad. Es chistoso cómo van de la mano; ahora estoy en Estados Unidos logrando mis metas, pero lejos de mi familia.