Katy Perry endulza a México
La cita para ver a Katy Perry fue en el Palacio de los Deportes, en la Ciudad de México.
Cerca de 17 mil fans se congregaron con orejas de "Mimi" y "Mickey Mouse" que iluminaron el recinto, además de las seguidoras que se vistieron como la cantante californiana.
Eran casi las 21:43 horas y la espera valió la pena, un video proyectado en las pantallas contaba una historia: una niña que buscaba a su gatito luego de renunciar a un trabajo en una carnicería, quien después se trasladó a una tienda de cupcakes, y así, entre un mundo de sueños y dulces emergió del escenario Katy, entonando "Teenage dream". En ese instante, los gritos y aplausos se hicieron escuchar.
Perry llevó el pelo negro, nada que ver con su actual look de mechones rosas, y envuelta en un vestido blanco con caramelos giratorios y una banderita de México en la mano. Se esforzó por decir unas cuantas palabras en español como el tradicional "¡Viva México!", que también hizo que los ahí presentes lanzaran gritos de alegría.
Este vestuario fue el primero de 15 cambios que realizó la esposa de Rusell Brand. Después usó un vestido entallado amarillo con verde, la cantante lució muy sensual, y por supuesto no podían faltar los temas "Humming bird heartbeat", "Waking up in Vegas" y "UR so GAY", mismos que dieron paso a que la cantante subiera a un fan que previamente le lanzó su camisa, ella le coqueteó, pero tuvo que despedirlo porque su marido había llegado, todo esto en broma.
El espectáculo que le siguió fue entre láser, luces y bailarines quienes parecían caramelos y las coristas cupcakes de tamaño real. Otras canciones que se hicieron presentes fueron: "E.T.", "Who am I living for" y "Pearl".
Uno de los momentos más emotivos de la noche estuvo acompañado no sólo de su sexto cambio de ropa -un vestido rojo con blanco en corte sirena-, sino también de una nube rosa que la elevó y paseo sobre sus fans, mientras entonaba "Thinking of you". Así desde las alturas Katy cantó con guitarra en mano.
Ya avanzado el concierto, Perry hizo algo inusual en muchos shows de otros artistas, se cambió ocho veces sobre el escenario, al tiempo que interpretaba "Hot n cold", el público enardeció en este punto. Entre coreografías y el pelo ahora azul de la cantante, todos corearon y gritaron.
La noche llegaba a su fin con la canción "Firework" -ganadora como Mejor Video en los MTV VMA 2011- y el outfit 14 se hizo presente, unos hot pants blancos con pequeños pastelitos de colores que hacían recordar el juego de twister, y con este tema se retiró... y como es costumbre regresó al escenario del Palacio de los Deportes para, ahora sí, despedirse con "California Gurls" y su último cambio de ropa, unos shorts y corpiño plateados.
El cierre fue entre juegos e invitó a varios fans a subir al escenario, mientras lanzaban pelotas de playa y Katy mojaba a los asistentes con una enorme manguera que parecía un caramelo.
Y así, con sus enormes ojos verdes y su mundo de dulces y nubes de algodón se despidió con un "Te amo México".
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