Las Vegas vive su peor crisis

La llamada Ciudad del Pecado jamás habían sufrido alteraciones relacionadas con las crisis del país, ya que su masa de capital se movía con libertad y fluidez a pesar de todo. El dinero que los turistas y apostadores destinaban al juego a bajado de manera notoria en el estado más lujoso de los Estados Unidos.

Sin embargo, la crisis económica que afecta a Estados Unidos continúa generando estragos en los espectáculos y a golpear el bolsillo de empresarios y artistas que se han visto en la necesidad de suspender sus eventos por falta de liquidez y por la poca asistencia del público. "Ya nos está afectando la crisis", declaró Ricardo Valencia, empresario que ha representado a artistas como Alejandra y Enrique Guzmán, Ricardo Arjona, y tiene una experiencia de 28 años. "Sin decirte nombres de artistas, teníamos cuatro festivales en Anaheim, Los Ángeles, Ontario y Las Vegas y los suspendimos porque ahora es difícil hacer las transferencias en los bancos; antes las tenías en dos segundos o minutos, ahora pueden tardar hasta seis meses para que te paguen". Los bancos, dice, no quieren soltar el dinero y se demoran, incluso meses para hacer un deposito de apenas 25 mil dólares. La única solución posible, agregó Valencia, es esperar a que haya liquidez en Estados Unidos.

Muchos proyectos a futuro podrían fracasar con esta situación en Las Vegas si no se toma una medida de recomposición económica. Los capitales extranjeros son los encargados de reflotar esta situación. Turistas europeos aprovechan la magnitud de la brecha que establece cada vez más entre la valuación del dólar con respecto al euro para disfrutar de los beneficios de Las Vegas y de otros puntos turísticos del país. El número de espectáculos en Las Vegas ha disminuido hasta en un 50 por ciento, afirman Félix Fregoso y Francisco Lara, dos de los promotores que realizan el mayor número de eventos para latinos al año, en esa ciudad. No solamente los promotores han sufrido pérdidas, también los artistas han tenido que bajar su tarifa para poder ser más atractivos a los empresarios. "Si antes hacíamos 20 conciertos al año, ahora estamos haciendo seis. Antes, un artista te cobraba 20 mil dólares por presentación, ahora te cobran 7 mil, y aún así lo pensamos bien porque en ocasiones no se recupera ni la inversión", señaló Fregoso. "Esta crisis no es nueva en el giro del entretenimiento porque desde que empezó en Estados Unidos, los artistas se vieron obligados a bajar sus tarifas porque no estaban saliendo a trabajar y por eso han tenido que recortar sus precios, sin embargo, siguen cotizando en dólares y no están considerando el tipo de cambio con respecto al peso mexicano".