Usar excéntricos accesorios, bailar a plena calle o reír a carcajadas no son cosa extraña para la reina Máxima de Holanda, quien se corona como una de las royals más relajadas y divertidas. Para seguir con esta “tradición”, Máxima volvió a sorprender en su visita a la Defence Parachute School.
La esposa del rey Guillermo de Holanda, de 51 años, no tuvo miedo de llevar a cabo una actividad extrema: saltar en paracaídas, y lo hizo con la confianza y destreza de una experta.
Por supuesto, recibió un cuidadoso entrenamiento antes de intentarlo. Le explicaron a detalle cómo funcionaba el equipo y qué debía hacer para completar la actividad con éxito. Además, conoció los diferentes programas de paracaidismo que se llevan a cabo en la academia.
En ningún momento se mostró nerviosa, incluso al subirse al avión desde el cual saltaría minutos después.
En redes sociales fueron publicadas algunas de las imágenes de este épico día para la reina, y la gente no tardó en reaccionar, muchos coincidiendo en la misma expresión: “¡Qué cool!”, y es que no cualquiera, mucho menos un miembro de la realeza, se atreve a hacerlo.
Vestida con un traje especial y tenis, la reina se mostró sonriente una vez terminada su proeza, reunida con el equipo de la academia que provee a las fuerzas armadas de entrenamiento en paracaidismo desde 2008.