El duque de Edimburgo tuvo un papel 'crucial' en la formación de William

El historiador Robert Lacey ha querido destacar la notable contribución del príncipe Felipe a la hora de preparar a su nieto para su futuro como rey de Inglaterra.
Felipe, duque de Edimburgo y su nieto, el príncipe William.

La muerte del

el pasado 9 de abril ha dejado un importante vacío en la familia real británica, como se desprende de los comunicados con los que la casa real quiso rendir homenaje y despedir públicamente al consorte de Isabel II y, sobre todo, del papel tan destacado que jugó el príncipe Felipe, siempre entre bambalinas, a la hora de formar a los miembros más jóvenes de la familia de Windsor de cara a sus futuras responsabilidades institucionales.

Bien sabido es que el aristócrata mantenía una relación especialmente estrecha con el príncipe William, no solo porque fuera uno de sus nietos preferidos sino porque, en algún momento del futuro, este tendrá que asumir la corona y el papel de patriarca de la familia.

El duque de Edimburgo siempre tuvo una excelente relación con su nieto William.

De esta forma, Felipe animó a Guillermo a caminar tras el féretro de su madre, la malograda Diana de Gales, en el funeral que se celebró en 1997 tras la trágica desaparición de la princesa, y le ofreció andar a su lado para que se sintiera respaldado en todo momento.

Ahora, el historiador Robert Lacey ha concedido unas reveladoras declaraciones a la revista People para subrayar precisamente lo "crucial" de la contribución que hizo el duque de Edimburgo en lo que a preparar a su nieto William para sus funciones reales se refiere.

Para el académico, el príncipe Felipe fue uno de los principales mentores con los que ha contado tradicionalmente el duque de Cambridge a fin de mentalizarse sobre la relevancia de su posición y saber actuar ante cualquier imprevisto que afecte a la estabilidad de la jefatura del estado.

El duque de Edimburgo se niega a tener una celebración por su cumpleaños 100.

"Felipe fue crucial a la hora de ayudar a Guillermo a convertirse en el futuro rey de Inglaterra. Suya fue la idea de programar almuerzos regulares entre Guillermo y su abuela. Eso sí, cuando llegó el momento de que la reina empezara a debatir con su nieto asuntos de estado y de la corona, Felipe se echó elegantemente a un lado para no interferir en la relación constitucional entre la soberana y sus herederos", ha explicado Lacey en conversación con el medio, al que también ha desvelado lo que el duque de Sussex, Harry, heredó del trabajo como mentor de su abuelo. "Harry ha tomado de él su sentido del deber, la importancia del servicio militar y también el sentido del humor", añadió.