También los royals padecen de la tormenta invernal

Las bajas temperaturas que azotan los últimos días han sido históricas. Este 2019 apenas empieza y el clima extremo ya se ha dejado sentir en algunos países del mundo, como por ejemplo en Australia, donde se vive un verdadero infierno que ha provocado la muerte de miles de animales. Datos duros, en la ciudad de Victoria murieron ceca de 2000 murciélagos de estrés por calor. Una verdadera tragedia natural.

Y mientras Australia es un verdadero infierno, en Gran Bretaña, especialmente en Escocia y Gales, el termómetro ha marcado -14.4 grados centígrados, temperatura más baja registrada desde 2012. Estados Unidos es punto y aparte del frío, la región norte ha registrado temperaturas tan bajas como el Ártico. También Chicago ha dejado un saldo de más de 20 muertos y 50 víctimas tratadas por congelación.

Nueva York es una ciudad que está sufriendo del frío, miles de habitantes se resguardan en sus casas para evitar temperaturas. Y como el frío no respeta a nadie, algunos miembros de la realeza sufren de ello también. Por ejemplo, la familia de los príncipes Pablo y Marie Chantal de Grecia se resguardan en su residencia de Manhattan con cuatro de sus cinco hijos. El mayor, el príncipe Constantino Alexios radica en Washington donde va a la universidad.

El día de ayer, el príncipe heredero Pablo subió una imagen de la ciudad tomada desde Central Park, en la cual se puede comprobar que efectivamente la ciudad está congelada. Apenas este fin de semana comenzará a subir un poco más la temperatura, el día de hoy a esta hora de la mañana está a -3º, un gran logro ya.

Su hijo, el príncipe Achileas Andreas también ha compartido otra imagen junto a su hermana mayor, la princesa Olympia muy bien cubiertos con chamarras, gorros y guantes.

El frío no perdona ni aunque se tenga sangre azul.

En mayo de 2017, Pablo y Marie Chantal se mudaron de Londres a nuevamente a Nueva York.

Cabe señalar que desde que se casaron en 1995 hasta 2008 vivieron en la ciudad de los rascacielos pero luego se trasladaron a Inglaterra hasta el año antepasado, cuando volvieron a la Gran Manzana.

Aunque Donald Trump lo niegue, el cambio climático ya está aquí y es una realidad que habremos de vivir todos.