Publicidad
REVISTA DIGITAL

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Tras muerte de la duquesa de Alba, ¿qué pasa con su título y herencia?

La mujer con más títulos nobiliarios en el mundo falleció este 20 de noviembre a los 88 años y muchos pensaban que su esposo se quedaría con su fortuna, pero ella repartió su herencia antes.
vie 21 noviembre 2014 10:45 PM
La mujer con más títulos nobiliarios en el mundo falleció este 20 de noviembre a los 88 años y muchos pensaban que su esposo se quedaría con su fortuna, pero ella repartió su herencia antes.
Duquesa de Alba La mujer con más títulos nobiliarios en el mundo falleció este 20 de noviembre a los 88 años y muchos pensaban que su esposo se quedaría con su fortuna, pero ella repartió su herencia antes. (Foto: Getty Images)

Cayetana Fitz-James Stuart, XVIII duquesa de Alba, murió este 20 de noviembre a los 88 años en el palacio de Dueñas, Sevilla, tras no poder recuperarse de la neumonía que la mando al hospital el fin de semana pasado.

La aristócrata de Europa con más títulos nobiliarios nació el 28 de marzo de 1926 y después de un año bastante complicado para su salud, con altas y bajas, hoy acabó con la idea de que sería una entrada más al hospital con salida triunfante.

Publicidad

Cayetana, fue conocida siempre por hacer lo que quería, dejó a un lado muchos estereotipos y protocolos para vivir al máximo. Desde pequeña viajo mucho y estuvo muy protegida por su padre, todo eso le sirvió después para cuidar el legado de los Alba. De hecho se casó tres veces y las tres por amor, aunque esto no evito las críticas de muchas personas y medios. Ella siempre que podía comentaba que: "Yo no he hecho nada que perjudicara el buen nombre de mi apellido y mis títulos. Y mucho menos a mis hijos".

Le molestaba que se casara con jóvenes y que al parecer fueran interesados en su dinero y títulos. De hecho en su último matrimonio, en 2011 con 85 años y contra todo pronóstico, volvería a casarse, esta vez con Alfonso Diez, que según dice no era más que un interesado. Por estas declaraciones Diez decidió renunciar a "cualquier tipo de pensión, título, derechos u honores que le pudieran corresponder fruto de su matrimonio". Ese gesto devolvió la paz a los Alba, ya que ninguno de los hijos de la Duquesa se llevaba bien con él y como prueba de que Alfonso no estaba ahí por interés, Cayetana decidió repartir su herencia en vida.

Notas relacionadas:

Carlos, hijo de Cayetana, es quien hereda el título como Duque de Alba. Aquí en el velorio junto a Alfonso Diez.
Carlos, hijo de Cayetana, es quien hereda el título como Duque de Alba. Aquí en el velorio junto a Alfonso Diez.


Ahora que su dinero ya está repartido entre sus hijos y que ella murió, el título de duque de Alba pasa a su hijo Carlos, duque de Huéscar y primogénito de su primer matrimonio. Ahora todo recae sobre Carlos Fitz-James Stuart, ya que después de 18 duques de Alba, le toca llevar el título de la familia. Carlos no se siente especial por ser el heredero del título, es sólo un español más. Estudió en el colegio de Los Rosales, es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense e hizo el servicio militar.

Después, decidió trabajar en una empresa privada y formo parte de varios consejos. Tras la muerte de su padre, en 1972, se convirtió en el gestor de los asuntos financieros de la familia junto a su hermano Alfonso. Desde ese momento se dedicó a conservar y ampliar el patrimonio de la Casa de Alba. A lo largo de su vida aprendió de sus padres el amor por el arte y cultura, ahora esto es uno de sus retos como duque de Alba, conservar el patrimonio de sus antepasados y darlo a conocer a toda España. Consciente de que se convertiría en el XIX duque de Alba, Carlos ha intentado llevar una vida normal basada en la discreción.

De su vida privada solo se conocen pocas cosas, entre ellas el anuncio en 1988 de su compromiso con Matilde de Solís-Beaumont y Martínez Campos, hija de los marqueses de la Motilla y condes de Casa Alegre. Su boda se llevó a cabo el 18 de junio de 1990 en la catedral de Sevilla, pero el matrimonio terminó en el 2000. De este matrimonio que duró 10 años, nacieron sus hijos Fernando Cayetano (1990) y futuro heredero de los títulos de abuela y padre, y Carlos (1991). Entre sus aficiones destacan el tenis, la navegación, la caza y las artes. A pesar de ser el heredero y que la duquesa haya dividido su fortuna en vida, él se lleva bastante bien con sus cinco hermanos: Alfonso, duque de Aliaga; Jacobo, conde de Siruela; Fernado, marqués de San Vicente del Barco; Cayetano, conde de Salvatierra; y Eugenia, duquesa de Montoro.

Con la muerte de la duquesa se marca un nuevo rumbo para Carlos, sus hijos y la Casa de Alba. Mientras tanto los restos de la duquesa serán incinerados en el cementerio de San Fernando y descansarán en el santuario del Señor de la Salud de la Hermandad de los Gitanos.

Publicidad

Newsletter

Recibe las últimas noticias de moda, sociales, realeza, espectáculos y más.

Publicidad