Aunque muchos lo consideraron el mejor desfile de New York Fashion Week tanto por la colección, el ejército de modelos famosas que desfiló —incluyendo a las hermanas Hadid, Kendall Jenner y Karlie Kloss— y el impresionante escenario, otros han mostrado su descontento a través de las redes sociales acusando al diseñador por “apropiación cultural”.
Y es que Jacobs se inspiró en la excéntrica productora de cine Lana Wachowski, el Londres de los ochenta, las Harajuku Girls y la cultura rave para crear los beauty looks de las modelos, conformados por una colorida y voluminosa melena llena de rastas, un peinado que muchos consideran propios de la cultura negra. Con comentarios como “¿Haces llevar a tus modelos rastas pero solo usas dos modelos negras?”, miles de personas acusaron a Jacobs de apropiación cultural en redes sociales.
Unos días después, Marc decidió hablar sobre el asunto: “He leído todos sus comentarios… y agradezco por expresar sus sentimiento. Me disculpo por la falta de sensibilidad expresada involuntariamente por mi brevedad. Creo de corazón en la libertad de expresión a través del arte, la ropa, las palabras, el pelo, la música… Todo. Por supuesto “veo” el color pero no discrimino. ESO ES UN HECHO”, reveló el diseñador a través de una publicación en su cuenta de Instagram. “Por favor continúen expresando sus sentimientos con libertad pero háganlo con amabilidad. Nada se gana con difundir odio a través de insultos e intimidación”, finalizó.
El look fue creado en conjunto con el estilista Guido Palau, quien aclaró a la revista web The Cut que no se trataba de ningún tipo de apropiación cultural: “Cuando se es creativo te inspiras en todo. No es algo homogéneo. Las culturas se mezclan y eso lo puedes ver en la calle. La gente no viste con una sola idea”.