Así que la próxima vez que pienses en regalar un ramo, asegúrate de que tus flores digan exactamente lo que sientes (o lo que no quieres que se malinterprete).
Lo que dices (sin saberlo) cuando regalas flores

Significado del color de las flores
Rosa roja: pasión y drama
La clásica de los clásicos. Un ramo de rosas rojas grita amor profundo, pasión intensa, y sí, hasta un poco de drama. Ideal para San Valentín, aniversarios… o cuando te quieres pasar de cursi.

Rosa naranja: deseo y energía
No tan cliché como la roja, pero igual de intensa. Las rosas naranjas dicen: "Me encantas, me inspiras y te admiro”.

Tulipán blanco: elegancia y perdón
Los tulipanes blancos son como un suspiro de calma. Piden disculpas sin palabras y reflejan paz, pureza y frescura. Perfectos para empezar de nuevo.

Margarita amarilla: amistad y sol
Súper underrated, las margaritas amarillas son alegría pura. Mándalas a tu bestie, a tu abuela o a ti mismo un día gris.

Lila: admiración y amor platónico
Los tonos lilas y violetas siempre han estado ligados a la magia, el misterio y el respeto. Son un must si quieres decir “me encantas”, pero sin presión.

Peonías rosa: romanticismo soft
Las peonías son delicadas y románticas, tal y como una película de Sofia Coppola. Si tu vibe es más dreamy y menos fuego, esta es tu flor.

Girasol: fuerza y felicidad
Regalar girasoles es como enviar luz embotellada. Son símbolo de admiración, energía positiva y buena onda. Son el “Te quiero ver brillar” en versión floral.

Flor blanca (en general): nuevos comienzos
Desde bodas hasta condolencias, las flores blancas son versátiles pero siempre cargadas de simbolismo. Hablan de respeto, amor puro y de cerrar (o abrir) ciclos.

(hatman12/Getty Images/iStockphoto)
El combo importa
Un ramo mixto también cuenta su propia historia. Juega con los colores como si fueran emociones: rojo + blanco = unión. Amarillo + rosa = ternura con buena vibra. Tú decides el mensaje.

Porque sí, las flores son bonitas, pero también expresan un mensaje.