quedó encantada con Alejandro Asensi alguna vez que lo vio en casa de su papá, Luis Miguel. Eso es lo que sostiene el episodio 4 de la nueva temporada de Luis Miguel, la serie.
En capítulos anteriores, la modelo y Mauricio Ambrosi [como se le conoce a Asensi en la serie] ya habían platicado; incluso él le había dado el teléfono de Micky para que ella lo buscara y se reuniera con él después de 11 años, pero en este episodio Michelle ya no lo vio como un amigo y confidente, sino como algo más.
La hija y el mejor amigo de LuisMi se encuentran en casa del cantante cuando ella se está mudando para vivir con él de manera definitiva. “¡Cómo se nota que estás de vuelta! Está feliz”, le dice Mauricio. Y ella le recuerda que él le había sugerido que le diera una segunda oportunidad a su papá.
Luego, entre las cosas de Michelle, él descubre un disco que le encanta y que a ella también y ahí es cuando la hija de “El Sol” se da cuenta de que tienen gustos en común.
En la vida real, desde un inicio, Alejandro Asensi siempre fue el mediador entre Luis Miguel y su hija.
“Ella lo buscó desde muy niña; hay reportes de llamadas de Michelle buscando a su papá desde los años 90, cuando fue creciendo y siendo consciente de la realidad y de quién era su padre. Alejandro Asensi era el encargado de comunicarlo a Luis Miguel”, dice la biografía Oro de rey.
Una vez que ella se mudó con
, pasaba mucho tiempo con Asensi “que le ayudaba también a intentar realizar su sueño que no era otro que el de ser modelo y aprender diseño gráfico”.Se cuenta en el libro que Michelle entró a estudiar a la UCLA y constantemente visitaba la casa y oficina de Luis Miguel en Los Ángeles. “Alejandro Asensi quedó encargado de todas las atenciones y necesidades de Michelle Salas... La razón decía claramente que donde el manager traicionara la confianza depositada en un aspecto tan delicado como el de su hija, eso daría pie a una crisis abrupta. De algún modo fue la crónica de un final de amistad anunciada, un final que afectaría mucho a Luis Miguel”.
Como se sabe, Michelle, de entonces 19 años, y Alejandro, de 39, terminaron por enamorarse y protagonizaron un mediático romance.