Después de recuperar completamente su salud,
Más tarde, se fueron Dubái y a varias partes de Medio Oriente. Como ya es costumbre en la familia, además de vestir a los niños igual, ahora la pareja se unió a la ocasión y todos se disfrazaron de árabes con túnicas blancas y un turbante rojo. La que también se veía divina es Inesita, quien se puso un encantador traje de danza árabe. Sin duda, todo esto para vivir la aventura al máximo. Asimismo, se adentraron en el desierto montando camellos y convivieron con animales típicos del lugar como halcones.
Ahora bien, madre e hija disfrutaron de un momento emotivo cuando se pusieron un tatuaje idéntico de henna.
Los niños no se quedaron atrás, ya que quisieron ir al parque Ferrari, donde se diviertieron como nunca.
A post shared by Ines Gomez Mont (@inesgomezmont) on
Aquí no paró la cosa, ya que de ahí partieron a Abu Dhabi, donde visitaron una mezquita. Claro todo esto con el outfit adecuado. No cabe duda de que a Inés le queda fabuloso, ¿o no?
Después de tanta aventura una playita es la opción perfecta. Es por eso que ahora la familia descansa para recuperar las energías perdidas. ¿A poco no se antoja hacer un viaje como estos de ensueño?