Rosie O'Donnell se llevó el susto de su vida al sufrir un infarto,el cual gracias a un comercial en la televisión, la presentadora estadounidense logró salvarse y se encuentra en su casa recuperándose.
A través de su blog,la también comediante, de 50 años, escribió que el estar viva se debía a los anuncios de una aspirina de Bayer que había visto en la pantalla chica, por lo que buscó información a través de Internet acerca de los síntomas que padecía.
"Gracias a Dios me salvé por un comercial, literalmente", dijo la actriz.
"Ellos (los doctores) llaman a este tipo de ataque el hacedor de viudas. Soy muy afortunada de estar aquí", agregó.
En un comunicado emitido hoy, su representante Cindi Berger, sostuvo a la revista People, que la productora fue muy afortunada.
"Ella por ahora está en casa y se encuentra descansando cómodamente. Ella es muy, muy afortunada”, dijo.
Rosie contó que sus problemas de salud comenzaron el 14 de agosto, después de ayudar a aun mujer a salir de su coche del estacionamiento en Nyack, Nueva York.
Unas horas más tarde, su pecho le dolía y sentía dolor en los brazos, como si estuvieran magullados, los dolores se convirtieron en náuseas, y tenía la piel fría y húmeda, por lo que decidió tomar una aspira que decía que era para las personas que creían que estaban sufriendo un ataque al corazón.