Roman Gasparyan demandó a Eva Longoria hace dos años. El denunciante alegó que la actriz perdió el control de su BMW y chocó contra él luciendo una mirada "roja y ensangrentada" en Hollywood Boulevard, en Los Ángeles.
Roman afirmó que él estaba en la autopista, esperando su turno para poder girar a la izquierda, cuando Eva apareció conduciendo su coche en dirección contraria y "cambió repentinamente de carril" colisionando contra su vehículo.
Según el informe, tanto la actriz como Roman conducían un BMW X5s, su modelo de 2002 y el de ella de 2010. Además de los daños materiales, el afectado asegura haber sufrido lesiones mentales y físicas derivadas del accidente.
Aunque su exmarido, Tony Parker, no estuvo implicado en el incidente, el campeón de la NBA está registrado como dueño del automóvil.
"No hay nada cierto en lo que dice, cualquier indicio de lo contrario es completamente falso", declaró Eva a través de su representante.
El acuerdo fue comunicado a la Corte Superior de Los Ángeles el 3 de agosto, tan solo 12 días antes de la primera vista del caso.