Recibe guardia de Jackson oferta de 500 mil dólares
Alberto Álvarez, guardia de seguridad que asistió a Conrad Murray en los últimos minutos de vida de Michael Jackson, afirmó haber recibido ofertas de la prensa de pagarle de 200 a 500 mil dólares por contar su historia.
En el tercer día del juicio que enfrenta Murray por homicidio involuntario de Jackson en la Corte Superior de Los Ángeles , Álvarez reveló los ofrecimientos que le hicieron llegar algunos medios para que diera una entrevista exclusiva y a la que se negó.
"No lo acepté", señaló enfático el que fuera el guardia de seguridad y que asistió a Murray cuando éste luchaba en la habitación de Jackson en su mansión rentada de Holmby Hills el 25 de junio del 2009 el día que falleció el llamado "Rey del Pop".
Al ser interrogado por el fiscal, David Walgren, Álvarez, quien se desempeñaba como jefe de logística de Jackson, compartió lo que presenció en la habitación de éste, en donde dijo haber visto al doctor aplicarle con una mano frecuentes presiones al pecho de Jackson.
"Vi a Michael con los ojos y la boca entreabiertos y cuando ya llegó la ambulancia yo ya lo vi sin vida", comentó Álvarez.
"Les dije hagan favor de salir. No se preocupen todo va a estar bien", indicó Álvarez, quien minutos más tarde recibió instrucciones del cardiólogo Murray de hacer la llamada al teléfono de emergencia para trasladarlo al hospital.
En la audiencia, se difundió la grabación de la llamada en la que Álvarez explicó que es urgente una ambulancia. "Es para atender a un hombre de 50 años no está consciente y no está respirando. Tiene un médico personal pero no está respondiendo al CPR (reanimaciones al pecho) ni a nada", explicó.
El guardia también contó que cuando llegó vio que Jackson tenía conectado un tubo a su pene, de los que se usan para el desagüe de orina, otro en la nariz, y también observó cuando le colocó un medidor de oxígeno en uno de sus dedos, pero aclaró no tuvo un equipo de monitoreo del corazón.
"Cuando llegue con el médico me dijo rápido Alberto tenemos que llevarlo a un hospital. Tuvo una mala reacción", expresó Álvarez quien opinó que nunca vio nada extraño en el doctor y que sintió que el estaba haciendo todo lo posible por curar a Jackson.
No obstante, compartió que Murray le ordenó que pusiera en una bolsa un puñado de frascos de medicinas, entre estos una sustancia blanca lechosa que aparentemente fue el propofol que le causó la muerte a Jackson.
"Solo pensé que su instrucción era juntar la medicina porque era para llevarla al hospital", explicó Álvarez.
El juicio que enfrenta Murray por homicidio no intencional se preveé que se prolongue de cuatro a cinco semanas y en caso de ser hallado culpable podría enfrentar una pena máxima de cuatro años de prisión y la perdida de su licencia profesional.
En la audiencia, la defensa de Murray interrogó a Álvarez e intentó mostrar algunas inconsistencias en las declaraciones del guardia de seguridad por sus descripciones, a fin de convencer al jurado de que la actuación del médico estuvo dentro de los márgenes correctos.
El juez Michael Pastor decretó un receso en donde regresará Álvarez y se espera la comparecencia de los paramédicos que lo trasladaron al hospital de UCLA y policías que estuvieron presentes el día del deceso del llamado "Rey del Pop".
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