La Angelina de la discordia

Su popularidad se basaba en escándalos. En los primeros años del 2000, la prensa publicaba que Angelina Jolie había sido adicta a la heroína, que tuvo relaciones con mujeres, que le gustaba beber sangre, que tenía fascinación por la muerte... La atención del público ya la tenía captada, pero no la admiración.

Fue entonces cuando su publicista Geyer Kosinski le propuso a Jolie darle un giro de 180 grados a su vida con lo cual ganaría respeto. Con el fin de potencializar su carrera de actriz, el manager le recomendó no sólo lanzar su imagen humanitaria ayudando a países como Camboya, sino sensibilizarse y adoptar un niño huérfano de aquel país.

También le propuso iniciar un romance con un actor que estuviera alejado de los escándalos. Todo esto mientras transformaba su look de Morticia por el de una mujer sofisticada y elegante. Angelina, desde luego, aceptó.

En 2004, la mujer de los labios súper sexys protagonizó la película Mr. & Mrs. Smith (2005), al lado de "el hombre más guapo del mundo": Brad Pitt. Él se había casado en el 2000 en Malibú con la actriz Jennifer Aniston en una boda espectacular que costó más de un millón de dólares.

Desde ese momento se convirtieron en la pareja más admirada y querida del showbiz. Se les conocía como "The Golden Couple", porque hasta coordinaban su color de pelo. En aquellos años, quienes conocían de cerca a Brad lo definían como un hombre tímido y de buenos sentimientos. Muy amable y con tendencia a enamorarse fácilmente. ¿Así o más suculento el manjar para la Jolie?

A decir de Halperin, durante el rodaje de la cinta, Angelina se valió de todas sus artimañas para seducir al esposo de Aniston. Según el autor, hay evidencias de que Jolie se metía en el tráiler de Brad y salía horas después con cara de "haber tenido acción". Algunas fuentes del set aseguran que Angelina no ocultaba su objetivo de seducir a Pitt a costa de lo que fuera. Y se lanzó a la yugular sin remordimiento alguno.

Al parecer Pitt disfrutó del affaire y sólo lo veía como tal, puesto que no pensaba abandonar a Aniston. Sin embargo, algo sucedió en el camino que él perdió el control de la relación y el desenlace fue otro: Angelina se salió con la suya. Por su parte, a Brad le dolió lastimar a Jennifer de esa manera. Dicen que es algo que hasta el día de hoy él no se perdona.