Lo mejor y peor de la Alfombra Roja

En el teatro Kodak, de los Angeles, se repartieron la noche del domingo los oscares a lo mejor del cine, y las estrellas internacionales que desfilaron por la alfombra roja de la 81 entrega de los premios Oscar, esperan haber conseguido el título de la mejor vestida.

No ha sido el caso de Kate Winslet, ganadora en la categoría de Mejor Actriz por la película “The Reader”, pues según la experta en moda y editora de la revista Elle, Sara Galindo, el vestido asimétrico gris grafito con encaje negro de Stefano Pilati para la casa Yves Saint Laurent y aretes Chopard, no le beneficiaron.

“Se pudo haber visto más joven, el peinado no le favoreció y el vestido pudo haber sido mucho más espectacular; más aún a sabiendas de que podía ganar en la categoría a la que estaba nominada y la cual ganó”, apuntó.

Y continuó: “Pudo haberse destacado como Marisa Tomei, Penélope Cruz o hasta Halle Berry; sin embargo, se vistió muy elegante, muy sobria pero no para ganarse un Oscar”, sentenció la experta.

Lo mismo le tocó a Beyoncé, quien portó un vestido de línea sirena para marcar sus curvas y en color negro con dorado que impidió que pasara inadvertida, lo que provocó que luciera un poco exagerada con su atuendo.

Ni que decir de Heidi Klum, quien al portar un vestido rojo con una llamativa abertura lateral, de Roland Mouret, no brilló como en otras ocasiones, pues “pudo verse mil veces mejor”, argumentó Galindo.

Por su parte, Sofía Loren no convenció a la experta, ya que le pareció verla muy acabada; aunque resaltó la capacidad de la actriz al usar accesorios que le benefician su imagen.

“Los guantes que uso le ayudaron un poco a tapar sus brazos y el vestido que portó, ella sabe bien que le iba a beneficiar su aspecto, pero su atuendo me pareció too much”

Y aunque Penélope Cruz ganó como mejor Actriz de Reparto, no gustó mucho aunque tampoco desentonó. Pues según Galindo, la española tiende a repetir los mismos modelos, lo que la hace un poco predecible al vestir.

“Penélope repite mucho la fórmula de su vestuario, como que ya es el mismo look siempre y su peinado con fequillo igual; aunque el vestido era increíble, no la hicieron ver espectacular”, comentó.

No fue el caso de Sarah Jessica Parker, quien según la editora de Elle, fue la mejor vestida de la noche al desfilar en la alfombra roja en un vestido strapless de tul de Christian Dior Haute Couture.

“Tenía el mejor escote que la hizo ver súper sexy”, aseguró la especialista.

Y entre las mejor vestidas, se encuentran Jennifer Aniston, que no estuvo nominada en ninguna categoría, pero quien lució un vestido Valentino de color claro y el cabello suelto, en un look que la mostró joven y divertida.

En contraparte e igualmente espectacular está Angelina Jolie, quien eligió la sobriedad del negro, que aunque no es de sorprenderse pues casi siempre utiliza este color, destacó aún más su belleza al lucir unos aretes verdes.

La actriz nominada por El Sustituto optó por un diseño del libanés Elie Saab, aretes de esmeralda de Lorraine Schwartz, un maquillaje natural y discreto y el cabello peinado hacia atrás. Un acierto para la esposa de Brad Pitt.

Pero las que se sacaron un 10 al vestir, fueron las actrices Anne Hathaway, al elegir un vestido de canutillos y lentejuelas plateadas de la colección Armani Privé y joyas Cartier, y Nicole Kidman que se inclinó por un vestido claro de L´Wren Scott.

LOS PEOR VESTIDOS FUERON LOS CABALLEROS

Para la experta no hubo peores atuendos que los de algunos hombres, pues argumentó que por lo regular visten de manera adecuada, pero para esta 81 entrega les faltó.

Tal es el caso de Mickey Rourke, actor de la película The Wrestler , quien portó un diseño de Jean Paul Gaultier; sin embargo, la combinación con sus accesorios como sus gafas oscuras, un peinado desaliñado y unos zapatos nada favorecedores lo llevaron al premio, pero de los peores vestidos de la noche.

Es el mismo caso para el actor de “La Duda”, Philip Seymour Hoffman, que al lucir un traje negro, con camisa negra y corbata negra, lo hicieron ver como si fuera a un funeral, pero lo peor fue haber llegado a la gala con un gorrito invernal tejido que lo colocó en la lista de los peores vestidos.

Y aunque Brad Pitt se vistió correctamente al lucir un trajeimpecable que lo hacían ver adecuadamente, desentonó al decidir ponerse un anillo de diamantes, pues según la experta “salía sobrando”.

Así, entre todas las personalidades de la noche, ellos fueron los más vistos, ya sea por su buen gusto al vestir o por su pésimo sentido al escoger su atuendo.

La noche estuvo llena de glamour, estrellas y flores. Esperamos con impaciencia la 82 entrega de la estatuilla dorada para ver quién será la más atinada de la noche. ¡Nos vemos hasta dentro de un año, Oscar!