Karla Terán y Hans Backhoff son los anfitriones de la Vendimia de Monte Xanic

Un fin de semana bastó para cautivar a decenas de invitados que estuvieron en Ensenada, Baja California, para celebrar la Vendimia de esta casa vinícola.
Karla Terán y Hans Backhoff

Rindiendo un tributo a la espectacular gastronomía mexicana, se realizó la edición 2022 de la Vendimia de Monte Xanic, una de las bodegas vinícolas más relevantes de nuestro país que con sus múltiples etiquetas ha conquistado, durante 35 años, el paladar de mexicanos y también alrededor del mundo.

Gracias a los sabores y la frescura del producto local y con el particular estilo de la cocina de Baja California, fue como se realizó este que es el mayor festejo de la industria vinicultora, ya que cada año el momento de la cosecha marca el inicio de un nuevo ciclo que provoca los vinos que conocemos ya en botella.

Hans Backhoff, CEO de Monte Xanic

La reunión que se realizó en la imponente bodega de donde en el 2000 surgió el vino premium Gran Ricardo, que es quizá la etiqueta más emblemática y sin duda la más importante de Monte Xanic.

La cita incluyó una cena creada por el chef Juan Cabrera Barrón, una de las figuras más representativas de la cocina mexicana moderna, quien mantiene una fuerte conexión con el origen de los sabores y la cocina tradicional en su restaurante Casa Tijuana.

Edición 2022 de la Vendimia de Monte Xanic

Esta cena constó de 6 platillos creados para maridar a la perfección con los vinos de Monte Xanic, logrando un recorrido a través de México y de su innegable herencia gastronómica.

Aletia Salas, Hans Backhoff y Víctor Morales

Para el día siguiente las sorpresas continuaban entre las vides y las montañas que rodean el recinto y fue momento del tradicional brunch que se sirvió desde los fogones y con el talento del chef Víctor Morales, quien a partir de Artio Asador Campestre ofreció platillos espectaculares con el delicioso sabor de campo.

La pisa de uvas fue uno de momentos favoritos de los asistentes

Sin duda la pisa de uvas fue uno de los momentos favoritos para los asistentes, y es que, como es tradición, en tinas de madera se colocaron las primeras uvas vendimiadas para recrear una de las más divertidas tradiciones que tienen los viticultores.