
1. Al levantarte toma de ½ a 1 litro de agua natural con el jugo de medio limón: cuando te despiertas, el cuerpo se encuentra deshidratado y con una carga de toxinas alta porque durante la noche se encargó de procesar y eliminar todo lo que no necesitabas. Cuando ingieres agua, el cuerpo se hidrata y puede realizar todos sus procesos metabólicos de manera más eficiente. Al agregarle limón, estás alcalinizando tu cuerpo, lo cual también ayuda a bajar de peso.
2. Tómate un jugo verde, smoothie verde o una ensalada de hojas verdes todos los días durante dos semanas: las hojas verdes no sólo tienen una carga muy alta de vitaminas y minerales, sino que su gran alcalinidad acelerará todos tus procesos metabólicos, incluyendo la pérdida de peso.
3. Practica una actividad física que te guste y sé constante: aquí al darte el chance y el tiempo para realizar la actividad física que elijas por lo menos 4 veces a la semana. No importa si es una clase de baile, correr, caminar, pesas, bici, nadar, hiking o cualquier otro deporte. Mientras más lo disfrutes serás más constante.
4. Elije tener una actitud y diálogo positivo con tu cuerpo: este es el consejo más importante. Tu cuerpo y todas sus células responden a tus emociones, y si lo único que reciben de ti son críticas y rechazo, tu cuerpo no va a cooperar para que puedas obtener la figura que quieres.